Rijk Zwaan abre de nuevo las puertas a los agricultores en unas jornadas en Almería, en esta ocasión sobre calabacín, para dar a conocer las cualidades de Grimsey. Se trata de una variedad de ciclo productivo largo recomendada en plantaciones de otoño con siembra en septiembre, y de primavera, para las que se aconseja sembrar en enero y febrero.

Este calabacín, sin problemas de cuaje y fase femenina continua, es del segmento medio-alto en cuanto a vigor, su planta abierta es de gran porte y su entrenudo muy corto. Destaca por unos frutos de gran calidad, de color verde oscuro y forma recta.

Como explica Manuel Puertas-Cañada, agricultor de Las Norias, uno de los aspectos positivos de Grimsey es que "no da problemas, es una planta limpia y gracias a su fuerte raíz crece con frutos de calidad, rectos, sin pelos y parejos". Este productor asegura que el calabacín "no se alarga y rellena muy bien, teniendo un peso idóneo para su comercialización". Él llevó a cabo el trasplante el 20 de septiembre: "Se trata de un cultivo muy precoz. Empezamos a recolectar a los 30-35 días y desde el principio, vimos que es una variedad que se regula perfectamente. La planta tiene un manejo sencillo y llevadero, algo que tengo en cuenta en los cultivos con los que trabajo".