Cara y cruz para los pimientos de Almería: precios estables pero más plagas

Agricultura

El aumento en la oferta no se ha traducido en la perdida de valor que se esperaba

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Pimiento rojo.
Pimiento rojo. / Pixabay

Podría pasar que un aumento en la oferta de pimiento tocase al bolsillo del agricultor almeriense, al tener que venderse más barato, pero la caída en las importaciones ha salvado a los productores. Enero acabó con más pimiento de la provincia en el mercado, menos de terceros países y un precio que se mantuvo estable. El kilo del tipo california rojo se vendía en la última semana del mes a 1,19 euros, apenas un céntimo menos que en la semana anterior. El california amarillo se vendía a 1,26€/kg y el verde, a 0,95€/kg, siendo este último el que menos dinero deja en el bolsillo del agricultor.

Según un informe del Observatorio de Precios y Mercados de la Junta de Andalucía, hay un problema que atenaza el futuro de los productores de este manjar. Son las plagas, que están asolando los cultivos y empezando a notarse en el ámbito comercial. Este organismo explica que, aunque los daños que provocan son meramente estéticos, el consumidor castiga el producto que tiene imperfecciones y no lo compra, aunque no soponga ningún riesgo para la salud humana. En los invernaderos, hay, hasta el momento, registrados tres tipos del trips. Son Thrips parvispinus, Frankliniella occidentalis y Scirtothrips dorsalis. La amenaza es que, en la venta en alhóndigas, pierda valor, aunque, por ahora, la tendencia es estable, con apenas unos céntimos/kilo a la baja.

Si se compara con las últimas campañas, los agricultores pueden estar de enhorabuena, pues los precios en origen están siendo superiores a los de la media 2020-23. Si en los últimos años al kilo de producto le costaba superar la barrera del euro, en esta ocasión se ronda el 1,20 euros/kilo. Con una tendencia a la baja, cabe preguntarse si se conseguirá remontar, ya que a partir de febrero la cotización comenzará a subir hasta principios de marzo.

Mejor clima y más luz: un 'regalo' para los invernaderos

El incremento en el volumen de alimentos comercializados ha sido generalizado en los principales productos que se cultivan en Almería. Esto ha provocado un derrumbe en las cotizaciones en origen, en especial de berenjena y calabacín. Aunque se ha perdido valor respecto a semanas atrás, o se han igualado o se han superado los registros de la campaña anterior, lo que habla de un curso que está siendo más provechoso para el productor. La cara está en la mayor rentabilidad; la cruz, en los costes, que no dan tregua.

Cuando se subsane oficialmente el problema del veto estadounidense, habrá que ver si el pimiento, y el resto de productos hortícolas españoles, sufre la política proteccionista de Trump y recibe aranceles. El presidente americano ya puso en la mira a la Unión Europea, bajo el pretexto de la competencia desigual.

Para entender por qué el invernadero rinde más, hay que mirar al cielo. Las buenas temperaturas que está haciendo en los últimos días, ligado a que las horas de sol poco a poco se empiezan a ensanchar, están provocando que las alhóndigas cada vez reciban más producto. Aquí se presenta la clásica 'ley de la oferta y la demanda'. A más hay, menos vale, aunque los productores están aguantando bien el 'tirón' en las producciones.

Marruecos vende más: la UE está comprando más tomate y calabacín

Los agricultores miran con un ojo a Marruecos y el Observatorio de Precios y Mercados sirve los datos. Las exportaciones desde suelo marroquí a la Unión Europea han aumentado esta campaña. Desde el Norte de África se está vendiendo más producto a suelo comunitario que en la anterior temporada. En total, desde que comenzara el período comercial, han entrado 285.000 toneladas de tomate (un 1% más) y 56.000 toneladas de calabacín (un 4% más).

Del campo a la mesa, 'subidón' en los precios: el pimiento, un 200% más

Del campo a la mesa, un ‘subidón’ en el precio de los productos hortofrutícolas. En el caso del pimiento verde, un 208%. En el del rojo, algo menos, un 185%. Esto implica que el agricultor vende su producto en torno al euro por kilo, pero en el supermercado se llega a comprar a tres euros.

Son datos de la organización agrícola Coag, que, una vez al mes, difunde datos sobre cómo se multiplican el precio de algunos productos. El aumento del pimiento es considerable, pero, si se compara con el informe de diciembre de 2024, menos brusco. La diferencia entre el campo y la mesa llegaba a ser entonces de hasta un 242%.

El histórico de informes permite ver cuál ha sido la evolución de los precios en origen. De casi un 300%era la diferencia en el precio hace cuatro años, aunque entonces se vendía más barato. El comparador permite, igualmente, cómo se ha tenido que estrujar el consumidor el bolsillo para comprar producto fresco:un euro/kg más que hace diez años.

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