Petición unánime de la cadena de valor del gran consumo al Gobierno central y a la Plataforma para la Defensa del Transporte de Mercancías por Carretera Nacional e Internacional: se requiere una solución urgente. "No entendemos que no se estén materializando ya medidas por parte del Gobierno mientras algunas empresas se plantean el cierre", señala el director general de Aecoc, José María Bonmartí, quien añade que la situación a causa del paro del transporte es un "problema de Estado". Asimismo, entendiendo las reivindicaciones de los transportistas, Bonmartí apela a su responsabilidad para dejar trabajar a los que quieren hacerlo. 

Felipe Medina, secretario general técnico de Asedas, cifra en 130 millones de euros las pérdidas diarias de la distribución alimentaria, con lo que recalca el coste de este paro.

El director general de Cooperativas Agro-Alimentarias, Agustín Herrero, remarca la situación complicada para el sector primario, sobre todo para el producto perecedero y ganadero. Sobre el último apunta a los problemas graves para la alimentación del ganado y las salidas del producto. Herrero, quien reconoce la interlocución constante con el Ministerio de Agricultura, explica que además del coste económico de perder producto altamente perecedero, se están originando otros costes medioambientales porque, en el caso de la leche, "no se puede tirar por una alcantarilla".

El director general de la Federación de Industrias de la Alimentación y Bebidas (FIAB), Mauricio García de Quevedo, alerta del mismo modo de una situación gravísima con una cadena de alimentación más tensionada que en los momentos más complicados de la pandemia.

Por su parte, el presidente de ACES, Aurelio del Pino, además de refrendar lo anterior, pide a los consumidores responsabilidad, que eviten hacer acopio y compras compulsivas que agravan el problema, pues aunque hay problemas de abastecimiento, no lo habrá de desabastecimiento.