Los invernaderos pueden duplicar su producción con mejoras estructurales

La consejera de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía, Clara Aguilera, visitó ayer, por primera vez, las instalaciones de la Estación Experimental de la Fundación Cajamar, para conocer las iniciativas en que trabaja para la mejora de la agricultura. Así, de entre los más de 40 proyectos en que investiga la entidad, Aguilera atendió a las explicaciones sobre los ensayos de agrietado de tomate, mejora de eficiencia energética y control de humedad en invernaderos, aprovechamiento de biomasa en superficies de cultivo protegido con recuperación calor y dióxido de carbono o producción de microalgas para la alimentación y nutracéticos, sobre todo, por la importancia de estas en cuanto a su riqueza en luteína con altas propiedades antioxidantes.

Uno de los proyectos que captó en mayor medida la atención de la consejera fue el basado en la mejora de las estructuras del invernadero para el incremento de la producción y su calidad. Según aclaró uno de los técnicos que lleva a cabo esta investigación, con una estructura de gran volumen que amortigüe los elementos climáticos, disponga de una ventilación y permita una transmisión de luz adecuada, además de mejorar la condensación, puede incrementar la productividad en más de 13 kilos por metros cuadrado, pasando de los 12 kilos de un invernadero tradicional hasta 25 o 30 kilos por metro cuadrado, sin un aumento en exceso de los costes. Estas nuevas instalaciones, subrayaba Aguilera, pueden ser la opción que necesita Almería para seguir siendo competitiva en los próximos 15 años.

Los nuevos diseños de invernaderos basados en modelos energéticos innovadores podrán acogerse a la nueva línea de ayudas para la modernización de estas estructuras, que se pondrá en marcha la próxima primavera, según detalló la consejera.

Aguilera insistió en que los grandes retos del campo almeriense pasan por una disminución en los costes de producción y elevar la productividad de forma sostenible, evitando los picos de producción a los largo de las campañas mediante un eficaz control de las temperaturas. También reiteró al sector comercializador de productos hortofrutícolas la necesidad de reforzar la concentración de empresas y buscar nuevos mercados.