Las organizaciones agrarias Asaja, COAG y UPA han convocado este lunes una concentración el próximo 9 de marzo en Madrid para pedir auxilio ante los problemas que atraviesa la apicultura en España. Los apicultores se manifestarán a partir del mediodía de este jueves frente al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) con el fin de visibilizar los problemas que atraviesan la producción y la comercialización de la miel española.

También pedirán la puesta en marcha de un conjunto de medidas ante la "grave crisis coyuntural y estructural" que afecta al sector, del que viven más de 36.000 familias en el país, según un comunicado. Las organizaciones convocantes han calificado de "absolutamente irresponsable" el comportamiento de los envasadores y de la distribución española, que "discriminan la miel española y la sustituyen por mieles importadas a precios muy por debajo de los costes de producción en nuestro país".

Han criticado que el porcentaje de miel española en los lineales de las grandes cadenas de distribución es "testimonial", por lo que el MAPA debe "actuar y defender" la apicultura del país. Los apicultores han achacado parte de la responsabilidad de esta situación a la norma de etiquetado y han pedido al Ministerio que promueva su modificación durante la presidencia española de la Unión Europea en el segundo semestre del año.

La cosecha se ha reducido a la mitad debido a la falta de lluvias y el calor extremo del verano

Además, la cosecha se ha reducido a la mitad debido a la falta de lluvias y el calor extremo del verano, de la muerte de hasta un tercio de las colmenas en algunas zonas como consecuencia de los problemas sanitarios y de los ataques de depredadores como los abejarucos o las avispas. También ha influido el fuerte encarecimiento de los costes de producción en los suplementos de alimentación o los combustibles para la trashumancia, según los productores.

El sector apícola se queja de que se ha quedado fuera de las ayudas extraordinarias habilitadas en el contexto de la invasión rusa de Ucrania, como la devolución de los 20 céntimos de descuento para los combustibles.