Protagonista centenaria

Apo Whang-Od, de 106 años, portada de la revista Vogue

Apo Whang-Od, la tatuadora indígena de 106 años que ha protagonizado la portada más longeva de la revista 'Vogue'.

Apo Whang-Od, la tatuadora indígena de 106 años que ha protagonizado la portada más longeva de la revista 'Vogue'. / VOGUE

La revista Vogue ha sorprendido con una portada de época. La protagonista de la portada, que carece de certificado de nacimiento, es la tatuadora indígena filipina Apo Whang-Od, que se ha convertido en la mujer más longeva que copa una portada de una revista de moda. La anciana reside en la remota región de Kalinga, donde lleva un estilo de vida muy alejado de los cánones occidentales y que probablemente sea uno de los secretos de su eterna juventud.   

Apo Whang-Od es la última artista que se dedica a la modalidad de tatuaje Batok. Esta técnica de tatuaje ancestral, natural del norte de Filipinas, se basa en plasmar en el cuerpo dibujos tradicionales con tinta y agujas naturales, que luego eran impresos con palos de bambú. El artículo de la revista Vogue indica que la artista cuenta con 106 años, siendo la protagonista más longeva de la conocida revista de moda, desbancando a la actriz británica Judi Dench que había aparecido en una portada de 2017 con 85 años.     

En una aldea de Kalinga denominada Buscalan nació hace 106 años Apo Whang-Od. Allí ha tatuado a sus vecinos desde que tenía 16 años. Ahora la aldea se ha convertido en un lugar de peregrinaje para muchos aventureros que pretenden conseguir uno de sus famosos tatuajes, con una técnica que nada tiene que ver con los tatuajes que vemos a diario.  

Así se describe a Apo Whang-Od en la prestigiosa revista de moda. “Anunciada como la última mambabatok de su generación, ha impreso los símbolos de la tribu Kalinga –que significa fuerza, valentía y belleza- en la piel de miles de personas que han peregrinado a Buscalan”.

De acuerdo con sus creencias y tradiciones, la artista mambabatok solo puede transmitir sus conocimientos a personas que forman parte de su mismo linaje. De esta forma, la tatuadora centenaria ha formado a sus nietas y sobrinas con el fin de que esta técnica ancestral no caiga en el olvido y siga conservándose. Apo Whang-Od ha asegurado en la revista Vogue que aún tiene cuerda para seguir con su oficio de toda la vida. “Solo pararé cuando ya no pueda ver, para poder seguir dando a la gente la marca de Buscalan, la marca de Kalinga”, ha asegurado con una entereza fuera de lo común para el resto de los mortales.  

 

 

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios