Con una caravana formada por un total de 46 vehículos, se ha celebrado la decimoséptima edición del Desierto de los Niños, que ha retornado a sus habituales fechas de la Semana Santa. Han participado 161 personas, de las cuales 48 eran niños menores de 14 años. Los vehículos de la gran aventura infantil, encabezados en esta ocasión por un Ioniq 5, han realizado casi 2.000 km por territorio marroquí en una semana.

El aspecto solidario y punto fuerte de esta edición ha sido la puesta en marcha del proyecto “Un bosque en el desierto”, acción llevada a cabo por la Red de Concesionarios Hyundai. Esta iniciativa plantará 500 palmeras en la localidad de Fezzou. En esta población del desierto ya se inauguró en 2019 una escuela, que se construyó con el dinero de otro proyecto financiado por Hyundai en colaboración con su Red de Concesionarios.

Entre las acciones llevadas a cabo está la plantación de un palmeral. Leopoldo Satrústegui, CEO de Hyundai, durante los trabajos de plantación.

"Un bosque en el desierto" pretende mejorar el futuro de la zona con un palmeral que, en unos pocos años, dará dátiles, convirtiéndose así en una de las pocas fuentes de ingresos para la población.

Hyundai ha estado representada por una buena parte de su gama SUV, con varias unidades del Tucson y Santa Fe, además del monovolumen Staria. Han participado un total de 20 vehículos de la marca en la caravana.

Se ejecutará por fases, para garantizar el éxito del palmeral. La primera, realizada con la llegada del Desierto de los Niños a Fezzou, ha consistido en una plantación simbólica de 46 palmeras, una por cada uno de los coches. Tras un acto de inauguración del futuro palmeral, los asistentes al viaje plantaron sus palmeras, identificadas cada una de ellas con los nombres de todas las personas que viajaban en el coche. La siguiente fase consiste en la construcción de un pozo y en la canalización de su agua para poder regar las palmeras, que se irán plantando poco a poco a lo largo de todo el año para completar las 500 unidades previstas en este proyecto.

El paso de la caravana dejo algunas infraestructuras recreativas a su paso y mucho material didáctico y deportivo.

El Desierto de los Niños repartió, asimismo, material escolar y deportivo en algunas zonas por las que pasó la caravana. En Fezzou se dejó material de todo tipo y se instaló un columpio en la escuela Hyundai – Federico Granda de la localidad, mientras que en Tisserdmine se montó otro, además de entregarse material. Pero la mayor parte del material que transportaba el camión de Bujarkay se entregó en la asociación de personas con discapacidad de Erfoud, con la que la Asociación Desierto de los Niños colabora desde hace unos años. Además, hay que destacar que, un año más, todo el material que ha repartido el Desierto de los Niños ha sido comprado en Marruecos.

Las revisiones oftalmológicas fueron, un año más, una de las tareas de las voluntarias de la Fundación Alain Afflelou.

Además, las voluntarias de la Fundación Alain Affleou han revisado la vista a más de 500 personas.