Ben Affleck se afianza como director con 'The Town', aplaudida en su paso por Venecia

En la competición, la francesa 'Venus Noire' y la griega 'Attenberg' dividen a la crítica

Ben Affleck y Rebecca Hall.
Ben Affleck y Rebecca Hall.
Agencias / Venecia

09 de septiembre 2010 - 05:00

El estadounidense Ben Affleck presentó ayer en el Festival de Venecia, fuera de concurso, su segundo trabajo como director, The Town, un entretenido filme que también protagoniza en el papel de un ladrón de bancos al que le acaban robando el corazón. La película, que ha sido bien recibida en su paso por la Mostra, cuenta la historia de una banda de ladrones de bancos de Boston que no pueden escapar a la realidad delictiva que les rodea.

La cabeza pensante del grupo es el personaje que interpreta Affleck, Doug MacCray, quien ve cómo su destino cambia cuando conoce más a fondo a la directora de uno de los bancos que atraca (Rebecca Hall, la Vicky de Vicky Cristina Barcelona), robándole el corazón y haciéndole ver la luz.

"Me planteé si estaba glorificando a un personaje criminal o glorificaba la violencia. Esta pregunta era importante. Las consecuencias morales eran importantes. Pero he intentado ser preciso y también lo más complejo posible", comentó Affleck. En el reparto de The Town figuran además los actores estadounidenses Jon Hamm (Don Draper en la serie Mad Men) y Jeremy Renner (el sargento William James en The Hurt Locker).

En la competición, la crítica se mostró dividida ante las dos propuestas que se exhibieron: Venus Noire, la nueva y prolija película de Abdellatif Kechiche (El grano y la mula), llegó ayer con dinero francés, ritmos africanos y la actriz cubana Yahima Torrès, en una jornada en la que también se presentó una muestra del nervio del nuevo cine griego llamada Attenberg, de Athina Rachel Tsangari. La primera cinta se centra en el caso real de una mujer sudafricana que fue llevada a París a principios del siglo XIX como espectáculo de circo y que por su ablación despertó el interés de la ciencia. El segundo filme, según aseguró su directora, ofrece "una visión de los humanos como animales, que intentan sobrevivir en una natureleza postindustrial alienada".

Pero uno de los momentos más emotivos del día de ayer se produjo cuando el público y los periodistas del festival recibieron con una sonora ovación al cineasta portugués Manoel de Oliveira, quien, a sus 101 años, presentó en la ciudad de los canales un nuevo proyecto. Junto al director de la Mostra, Marco Müller, De Oliveira (Oporto, 1908) asistió a la proyección oficial de su corto Painéis de Sao Vicente de Fora, Visao Poética. Esta cinta, de 16 minutos de duración, supone un canto a la paz tomando como punto de partida la composición pictórica que da nombre al corto, obra atribuida al pintor portugués Nuno Gonçalves.

stats