El XXVII Festival de Jazz de Almería comenzó con el cartel de aforo completo. Las 150 sillas del Museo Doña Pakyta se llenaron el viernes para disfrutar del nuevo talento reunido en el precioso proyecto Big Bandarax. Y es que no hay mejor forma de comenzar el certamen que escuchando a los jóvenes valores.

En su actuación, muy aplaudida, realizaron un viaje musical por los estándares del jazz, el swing, blues y un amplio abanico de sonidos. Junto a la big band se fueron subiendo al escenario invitados, entre ellos Pablo Mazuecos, alma mater de Clasijazz, que los acompañó al piano.

El concejal de Cultura, Diego Cruz, destaca que “el Festival de Jazz regresa para hacernos disfrutar con la creatividad de su música, con grandes talentos como Paco Rivas y Jorge Pardo, y la implicación de los músicos almerienses. El festivas va a seguir creciendo en los próximos años”.

El programa continuó ayer por la mañana, esta vez en el Museo de la Guitarra, desde las 11 horas, con una masterclass del guitarrista almeriense, afincado en Madrid, Paco Rivas. Fue una experiencia única donde Paco Rivas deleitó a un público dispuesto a dejarse llevar por la experiencia de músico.

Acompañado por el concejal de Cultura, Diego Cruz, y Chipo, guitarrista y bajista de la ciudad. El músico ofreció sus consejos a los participantes, desde embellecimientos hasta acordes. “La música es como una conversación, si hablas rápido, al final no te enteras de nada”, explica Paco Rivas.

El guitarrista almeriense Paco Rivas se define como un “servidor de la música” y con sus manos y una guitarra, fue capaz de arrancar largos aplausos en la sala por su calidad y profesionalidad con el instrumento. Además, estuco acompañado en una parte de la masterclass por el guitarrista Libo, donde juntos, hicieron demostraciones con sus respectivas guitarras, a las preguntas que los asistentes iban haciendo en base a sus dudas. En esta línea, Paco Rivas manifestó que “es muy importante que cuando tocamos, hay que escuchar a los demás y viceversa, para la música creativa es muy importante”.

Tras esta masterclass, anoche, el grupo ‘Olé Swing’, del que forma parte Paco Rivas, deleitó con su fusión de copla y jazz en el Museo Doña Pakyta. ‘Ole Swing’ es un cuarteto integrado por las guitarras de Paco Rivas y Fernando Bellver, el violín de Roberto Jabonero, y el contrabajo de Josemi Garzón, que busca el nexo entre dos territorios a la vez cercanos y remotos como son la copla española y el chispeante gypsy jazz francés.

El viernes, 13 de septiembre, a las 21 horas en el Museo Doña Pakyta actuarán en concierto el grupo Combo Latino por un precio de 6 euros las entradas.

El sábado, 14 de septiembre, el gran flautista y saxofonista, Jorge Pardo, ofrecerá una masterclass a las 11 horas en Clasijazz, y a las 21:00 horas actuará en el Museo Doña Pakyta junto a Combo Clasijazz Ensemble.

Jorge Pardo (Madrid, 1956). A los 14 años inició estudios de solfeo, piano y flauta en el Real Conservatorio de Madrid. Se interesó de inmediato por el jazz y comenzó a tocar en grupos de aficionados en conciertos universitarios.

En 1967 debutó profesionalmente en clubes de Madrid con músicos locales y norteamericanos de paso por la ciudad. En 1974 inició una fructífera relación con el club Balboa Jazz donde tuvo ocasión de colaborar con figuras como Slide Hampton, Pony Poindexter, Steve MacCall, Tete Montoliu, Pedro Iturralde, David Thomas, Chet Baker, Elvin Jones y Lou Bennett, entre otros muchos.

En 1975 fundó con el cantante Pedro Ruy Blas el grupo Dolores, adscrito a una innovadora forma de fusión poco valorada en su momento y recogida en tres álbumes Dolores, La puerta abierta y Asa-Nisi-Masa. Sin duda, el cierre del Festival será con un artista fascinante.