La vinculación de Almería con el mundo del cine se enseña también desde las aulas de los centros educativos de la ciudad, tal y como ha ocurrido con el colegio La Salle Chocillas que ayer celebró en la Casa del Cine la entrega de premios de su primer festival Chocillas es de Cine, que estuvo presidida por el concejal del Área de Cultura y Educación del Ayuntamiento de Almería, Diego Cruz, y la directora del centro Concepción Zamora.

El premio al mejor cortometraje fue para Acho, que somos murcianos, que también se llevó el de mejor guión y mejor actor, para Rubén Sánchez Berenguer. El premio a mejor actriz fue para Alejandra Castillo González y el de mejor fotografía fue para Internado La Estrella. Todos ellos, como el resto de sus compañeros, se lo pasaron en grande ayer en la Casa del Cine y posando en el photocall y junto al concejal de Cultura y la directora del centro.

Diego Cruz se dirigió al alumnado que ha participado en la actividad asegurando que “independientemente de las personas que se han llevado los premios, todos y todas habéis ganado ya. Porque habéis trabajado en equipo, habéis resuelto los problemas que os han ido surgiendo en la grabación de vuestros trabajos, habéis aprendido de lo bueno y de lo malo, os habéis formado para conseguirlo, habéis luchado por un objetivo común y os habéis superado a vosotros mismos. Por eso, todos habéis ganado y os traslado mi más sincera enhorabuena. Espero que vuestra presencia en la Casa del Cine os siga inspirando nuevas historias”.

La directora de La Salle Chocillas, Concepción Zamora, detallaba que “el festival es un proyecto de Aprendizaje basado en Proyectos, interdisciplinar, con 3º de ESO, donde han entrado en juego todas las áreas de conocimiento de este curso académico, bajo el nombre de Festival de cortometrajes de La Salle Chocillas es de Cine, donde aunar todas las disciplinas educativas y la cultura por medio del arte cinematográfico, y todo durante dos semanas intensas, no sólo utilizando todas las horas lectivas de clase, también utilizando horas extraescolares para rodaje y montaje”.

Tal y como explica el profesorado del centro, en primer lugar debieron realizar un estudio estadístico entre su público potencial (alumnado de 1º, 2º y 4º de ESO del Centro), con el que saber los gustos de estilo cinematográfico de dicho público, que les ayudaría a decidir el género de sus cortometrajes. Una vez escogido el género vino la parte creativa, había que escoger la historia, realizar un guión literario así como el guión cinematográfico, el story board, decidir los espacios de rodaje, el vestuario o el reparto de tareas.

Desde las distintas materias se les pidió, entre otras cosas: estudiar el tipo de dieta que llevan las actrices y los actores habitualmente, y una propuesta de dieta saludable acorde al trabajo realizado; traducir los textos a francés e inglés, tratar en los cortometrajes algún dilema moral, así como las desigualdades en el mundo o el reciclaje de residuos.

Recibieron una charla a cargo del almeriense David Turpin, que trabaja en la producción audiovisual en Madrid, donde explicó muy bien los distintos planos, algunas claves a la hora de abordar un cortometraje, y terminologías más comunes, todo un lujo para la formación de nuestro alumnado. Tras haber rodado y montado los cortometrajes (seis en total, correspondientes a los seis equipos cooperativos en los que se divide habitualmente la clase), se entregaron todos los trabajos y documentación realizada al profesorado.

Después se proyectaron todos los cortometrajes entre el alumnado del resto de cursos de ESO, quienes votaron en una pequeña ficha al mejor corto, mejor actriz, mejor actor, mejor guión y mejor fotografía, con lo que se obtienen los resultados con los que se ha realizado la entrega de premios de la Gala final, como colofón del Proyecto realizado.