Fernando Yélamos acaba de publicar la obra Dos estrellas en el cielo de los Filabres con ilustraciones de Andrés García Ibáñez y prólogo de Andrés Olivares. Juan Carlos Heredia Puerto, Presidente de la Unión Nacional de Escritores de España apunta que “Fernando Yélamos publica un nuevo libro, en el que los objetivos solidarios vuelven a ser protagonistas. El autor de Quejidos de tu ausencia, poemario ganador del V Concurso Internacional María Eloísa García Lorca, irrumpe en esta ocasión con una obra en la que el sufrimiento adquiere una dimensión máxima, pero en la que afloran imágenes de ternura que impactan en la sensibilidad del lector, abriendo en canal cualquier atisbo de indiferencia ante el drama del cáncer”.
“La narración principal de Dos estrellas en el cielo de los Filabres representa el desgarro extremo del fatalismo, acentuado en la España rural, y el de la impotencia general de cualquier ser humano ante la muerte, descrita por un autor que conoce el sufrimiento en persona y que, sin pretenderlo, tal vez podría ser aquel Antonio, amigo de Ignacio, el niño fallecido por leucemia. En contraposición, el poemario breve del libro presenta al autor desde una perspectiva de nostalgia y con otra relación ante el tiempo”, afirma Heredia Puerto.
Fernando Yélamos Rodríguez nació en Bayarque. Es doctor en Medicina y Cirugía por la Universidad de Granada, en la que obtuvo el premio extraordinario. Ha sido profesor en la Universidad de Almería y en la Universidad de Granada.
En el ámbito literario, siempre con fines solidarios, destacan sus obras más queridas: Hombres de acero y corazón por dentro (2005), Escenas de guerra y sentimientos (2005), En busca de una luz en la oscuridad (2015), Quejidos de tu ausencia (2018).
Recibió el primer premio de poesía en el V Certamen Internacional María Eloísa García Lorca, convocado en 2017 por la Unión Nacional de Escritores de España.
Yélamos en la introducción de la obra subraya que “relato unas vivencias del siglo pasado, de finales de los años sesenta, que escribí hace unos treinta años. Los tiempos han cambiado una barbaridad, así que a muchos les parecerá que cuento una historia muy antigua. Sin embargo, quiero compartirla con ustedes para recordar cómo era la vida cotidiana en los pueblos de antaño y las vicisitudes de una familia con un niño enfermo de leucemia”.
“En primer lugar, pido perdón por mi atrevimiento al publicarla y, en segundo lugar, quiero mostrar mi agradecimiento a todas las personas que me han ayudado a elaborar este librito; en especial, a mi amigo Andrés García Ibáñez por sus geniales dibujos y su apoyo”, concluye Yélamos.
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