La magia del teatro permite que se produzcan, a ojos del público, las conversaciones que nunca llegaron a tiempo en vida. Ese es el leit motiv principal de Los Hermanos Machado, la obra de la compañía Teatro del Temple que protagonizó la tercera y última cita del ciclo Delicatessen que organiza Axioma Producciones en el marco de la programación de temporada que coordina el Área de Cultura del Ayuntamiento de Almería.

La obra gira en torno a las alucinaciones y apariciones que siente Manuel Machado cuando visita la casa materna, vacía, tras las muertes de su madre y de su hermano Antonio en Colliure y el exilio del resto de su familia en tiempos de Guerra Civil. Manuel se muestra atormentado de haber cambiado sus ideales, que eran los mismos que los del resto de su familia, a cambio de sobrevivir y, sobre todo, no haberse podido explicar y despedir de querido Antonio, a quien quiso como un hijo. Antonio se aparecerá en la mente de Manuel y comienzan las conversaciones.

A través de un magnífico texto firmado por Alfonso Plou, la dirección de Carlos Martín, y una impecable interpretación del propio Carlos en el papel de Antonio, de Félix Martín en el de Manuel y especialmente de Alba Gallego en todos los papeles femeninos: las parejas de Antonio, Leonor y Guimar, la de Manuel, Eulalia, la madre, la actriz de ‘La Lola se va a los puertos’, la de Matea, cuñada de ambos o la asistenta de la casa materna.

A lo largo de la obra, las contradicciones y las incomprensiones fraternales se reviven con fuerza y, por el camino, alusiones a otros compañeros a los que la Guerra Civil se llevó por delante en su cicatriz separadora: Miguel de Unamuno, Miguel Hernández, Federico García Lorca.