Cultura

El IEA publica en edición facsímil el poemario ‘Trigo del Corazón’ de Celia Viñas

  • La Diputación de Almería recoge en este trabajo, coordinado por Francisco Galera, los 69 poemas que la escritora y profesora seleccionó de sus cuadernos manuscritos y que se lanzó en 1946

Francisco Alonso, director del IEA junto a Francisco Galera.

Francisco Alonso, director del IEA junto a Francisco Galera.

El Instituto de Estudios Almerienses de la Diputación de Almería acaba de publicar en edición facsímil la obra Trigo del Corazón de Celia Viñas. Este trabajo se publicó en 1946 y es el primer libro de esta autora. Reúne los 69 mejores poemas que selecciona de sus cuadernos manuscritos. Los 300 ejemplares se agotaron en un mes, teniendo repercusión nacional ya que reconocidos escritores y profesores se interesaron por él e hicieron reseñas que tuvieron mucho eco en la época.

Inician la obra, coordinada y con un epílogo a cargo de Francisco Galera, tres breves prólogos que la comentan desde la perspectiva del maestro Ángel Valbuena, la amistad de Luis Úbeda y el cariño del alumno Gabriel Espinar. Las ilustraciones son de Manuel García Ferre y las caricaturas, de Leopardo de Anchóriz Fustel.

Paisajes de Almería como Gádor, Alhama y Laujar constituyen el tema principal del libro. Nadie, salvo los indalianos en sus cuadros, supo captar su belleza, sentirlo e interpretarlo así. La evocación angustiosa del paisaje y el abandono de los sedientos campos de Almería aparecen en el poema Almería, que abre el libro, y en muchos más, especialmente Un árbol.

El director del IEA, Francisco Alonso, elogia la coordinación de Francisco Galera y “el respeto al original y el mimo que se ha puesto en publicar este libro tal y como se lanzó al mercado en 1946. Para el IEA es un objetivo prioritario poner en valor y divulgar las obras y el legado de los grandes autores de la historia de nuestras letras donde Celia Viñas brilla con luz propia”.

El poeta Manuel Faura apunta que “alguien tenía, desde Villaespesa, que abanderar nuestra tierra almeriense sin razones de amaneramiento localista. Puede que la autora haya encontrado en Almería lo que Antonio Machado en Soria: un sabor elemental, de provincia pequeña”.

También canta a otras ciudades andaluzas (‘Granada celeste’, ‘Córdoba…) y, dado su carácter misceláneo, dedica varios poemas al mar, a estampas de animales, al mundo de los niños, a temas religiosos. Celia realizó correcciones sobre el texto original ya impreso. Esta edición facsímil del IEA, con motivo del 75 aniversario de su publicación, las ha respetado.

Celia Viñas Olivella, profesora y escritora, nació en Lérida en 1915, si bien su familia se trasladó a Palma de Mallorca pocos años más tarde, en 1923. Cursa estudios de Filosofía y Letras en la Universidad Autónoma de Barcelona y posteriormente se traslada a Madrid donde preparará oposiciones y conseguirá la Cátedra de Lengua y Literatura en el Instituto de Bachillerato Femenino de Almería en el año 1943.

Desde entonces, será su ciudad de adopción. Instalada en Almería desarrolló una importante labor cultural en el centro educativo y en la propia ciudad. En 1953 contrae matrimonio con Arturo Medina en Palma de Mallorca. Un año más tarde, en junio de 1954, muere prematuramente.

Entre su numerosa obra se encuentra teatro, novela, ensayo y sobre todo, poesía. En su vertiente dramática destaca con su obra Plaza Virgen del Mar; entre los ensayos hay que citar Estampas de la vida de Cervantes; entre sus novelas se encuentran Tierra del Sur, Viento levante y La Peregrina, esta última inacabada.

También escribe cuentos que se recogen en su libro El primer botón del mundo y 13 cuentos. Sus libros de poesía más conocidos son: Trigo del corazón, Canción Tonta en el Sur, Palabras sin voz y Del foc y la cendra, este último en catalán. Un año después de su muerte su marido publicó un libro con poemas sacros, Como el ciervo corre herido.

Celia Viñas se casó con el profesor almeriense Arturo Medina y vivió muy unida a sus habitantes hasta su muerte en 1954. Celia Viñas fue una mujer que inculcó una serie de valores a sus alumnos y también impulso mucha la cultura en la ciudad.

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