Dos horas de espectáculo en Roquetas de Mar. La protagonista, una vez más, era Pasión Vega. El Teatro Auditorio de Roquetas de Mar se rendía el sábado a la voz y al encanto de esta malagueña que llegaba con los hermanos Víctor y Luis del Valle al piano para presentar su nuevo espectáculo Dos pianos con Pasión. (Cartas desde Nueva York).

Fueron dos horas de recorrido musical donde Pasión Vega y sus dos excelentes acompañantes al piano dejaron constancia de su valía artística y sobre todo su capacidad de interpretación. Porque este espectáculo además de música tuvo una exquisita puesta en escena, donde las dos horas giraron en torno al contenido de un baúl encontrado en Nueva York que se encontraba en el centro del escenario.

A lo largo del espectáculo iban apareciendo los misteriosos objetos que contenía el baúl, mientras se iban sucediendo las canciones, que precisamente iban perfectamente hilvanadas con la historia que se sucede. Un capote, un sombrero, unos zapatos de bailarina, un mantón de Manila, una gramola son algunos de esos objetos.

Aunque siempre se mantiene el misterio de quien será ese baúl. Al final, en el capote aparecen las iniciales I.S.M., del torero Ignacio Sánchez Mejías.

Pero antes de que el misterio deje de serlo, Pasión Vega con su magnifica voz hizo un recorrido por músicas populares que partían con Falla con La Danza de la Vida Breve , siguiendo con El paño moruno, La Jota, La nana de Falla, El Polo de las Siete canciones populares españolas.

Entre tema y tema se suceden los diálogos, hay misterios, Pasión Vega se mueve sobre el escenario.

Tangos como El choclo, piezas lorquianas como El café de chinitas u otras más actuales como La flor de Estambul, partituras que conectan con Hispanoamérica como Alfonsina y el mar, o piezas inmortales como Granada, de Agustín Lara. Aunque hubo que descubrirse cuando sonaron coplas como Y sin embargo te quiero y En tierra extraña.

Al final el misterio se resolvió. La propietaria del baúl era Encarnación López, La Argentinita, figura de los años 20 del siglo pasado y amante de Ignacio Sánchez Mejías. Una mujer que ha dejado huella gracias a títulos como Los cuatro muleros, las Sevillanas del siglo XVIII y La tarara.

Varios minutos estuvo el público puesto en pie aplaudiendo a Pasión Vega y los hermanos del Valle. Pero no podía irse sin cantar uno de los temas que le pedía el público. La cantante se fue del escenario cantando María.

El público fiel a la cantante salió encantado de haber disfrutado de un recital fascinante y además distinto. En esta ocasión, aparte de verla como cantante, Pasión también hacía de actriz.

La gira de Dos pianos con pasión. (Cartas desde Nueva York), con Pasión Vega y los hermanos Del Valle, dirigida por Vanessa Rodríguez, con arreglos musicales de Alberto Martín Díaz y que fue estrenada en Sevilla el 28 de septiembre, continuará los próximos meses en diferentes ciudades de España.