Varios colectivos piden a la Junta que expropie el Cortijo del Fraile

Las asociaciones Amigos de la Alcazaba y Amigos del Parque Natural anunciaron ayer que van a adoptar la vía judicial para instar a la Junta de Andalucía a que inicie expediente para la expropiación forzosa del Cortijo del Fraile, declarado Bien de Interés Cultural (BIC).

La actuación se enmarca en una "campaña social, política y judicial" para parar el "flagrante estado de abandono y de deterioro" en el que se encuentra el monumento, propiedad de la empresa 'Agrícola La Misión' con sede en Murcia y que acumula numerosas multas coercitivas de la administración autonómica por su negativa a consolidar, restaurar y rehabilitar el inmueble.

La presidenta de Amigos de la Alcazaba, María Teresa Pérez, y el presidente Amigos del Parque Natural, Enrique Ruiz, explicaron que el objetivo del "procedimiento legal "que van a emprender es que la Junta "aplique" el artículo de la Ley de Patrimonio Histórico que permite que el Cortijo del Fraile "se pueda expropiar por utilidad pública".

Ambos colectivos consideran que la administración debe "pasar" de imponer unas sanciones económicas "que se desconoce si se están cobrando", a ejercer el derecho de expropiación para recuperar el Cortijo del Fraile. Lamentaron que Ayuntamiento de Níjar y Junta de Andalucía se estén dedicando "a jugar un partido de tenis con donde la pelota es el Cortijo del Fraile, mientras que su situación está cada vez más deteriorada".

Cabe recordar que Ecologistas en Acción remitió en enero una carta al consejero andaluz de Educación y Cultura, Luciano Alonso, en la que le instaba a iniciar la expropiación forzosa después de que el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) dictaminase que era de su competencia la conservación de este inmueble, declarado Bien de Interés Cultural (BIC) pero en situación legal de "ruina".

Por otra parte, el Ayuntamiento de Níjar ordenó en noviembre de 2013 mediante decreto a la mercantil propietaria que acometiese en el plazo de un año las obras para la consolidación y reparación del inmueble y le daba un máximo de 30 días para presentar el pertinente proyecto de actuación al tratarse de una edificación declarada Bien de Interés Cultural (BIC).

Según el informe de los técnicos municipales, el estado actual de la edificación es "muy heterogéneo" ya que existen construcciones "parcialmente derruidas junto a otras aún en pie y otras al borde del colapso". Así, detalla que las zonas con una mayor degradación corresponde a la vivienda del pastor, el bebedero y pajar y la vivienda del cortijero.