El virtuosismo de la guitarra de Rafael Aguirre logra conquistar al público

Magistral, virtuoso y lleno de emoción. Así fue el miércoles el concierto en el Museo de Almería de uno de los grandes de la nueva generación de guitarristas internacionales, Rafael Aguirre, que actuó dentro de la programación de conciertos del XII Certamen Internacional de Guitarra Clásica Julián Arcas, organizado por la Fundación Cajamar.

El joven músico entró en escena sin mediar palabra y, tras una breve reverencia, arrancó su interpretación de Asturias de Albéniz con una técnica espectacular y una gran conexión con el público, que lo ovacionó desde la primera pieza que tocó. A continuación, Aguirre se presentó e indicó que haría algunas variaciones en el programa, aunque no dejaría de tener "sabor español". De hecho, la siguiente obra que interpretó fue Gran Jota de Francisco Tárrega, seguida de Francisco Alegre, del compositor Manuel Quiroga.

El guitarrista, uno de los más aclamados por la crítica internacional, continuó su particular homenaje a la música de su país con Serenata Española de Joaquim Malats, e incluso se atrevió con una composición flamenca de Paco de Lucía, Guajiras.

Tampoco faltaron las piezas clásicas. Aguirre emocionó al público con Escenas de Niños de Robert Schumann. Además, introdujo en su programa tres preludios del compositor norteamericano George Gershwin, que dieron un toque neoyorquino al espectáculo. "Me gustaría que imaginaseis que estáis en New york, que estáis llegando a la Gran Manzana, y que sentís esa energía que desprende la ciudad", indicó justo antes de tocar esa pieza musical.

El intérprete malagueño explicó que había elegido ese programa porque le gusta ofrecer en sus conciertos "todas las caras de la guitarra española". Además, concretó que con cada público se decide una composición u otra. "El público me inspira, su energía, el programa lo he elegido teniéndolo en cuenta", indicó.

En esta misma línea, señaló que el intérprete debe de dar la mano al compositor. "Tienes que imaginarte cómo es el compositor, que es lo que siente. Si no se hace así, la interpretación no llega a ser convincente, y eso el público lo nota, porque es más inteligente de lo que uno cree", aclaró el guitarrista.

Por otro lado, Aguirre recordó que hace cuatro años ganó el primer premio del Certamen Julián Arcas: "Tuve que venir muchas veces a participar, y además también gané en la modalidad de José Tomás. Para mí significó mi primer gran premio en un concurso tan grande y a nivel internacional".

Rafael Aguirre ha conseguido doce primeros premios en los concursos internacionales más prestigiosos del mundo, y ha recibido elogios de la crítica especializada.