Todos los presidentes de gobierno desde Adolfo Suárez han acometido cambios de sus equipos a lo largo de sus respectivas legislaturas. Las razones y objetivos de los cambios son diversos: del muy evidente desgaste del equipo anterior o de alguno de sus miembros, hasta la necesidad de tomar impulso con personas que entran frescas y motivadas, en un intento de relanzamiento de la legislatura. El presidente Sánchez, ha aprovechado el final de los peores efectos de la pandemia para cambiar a una parte sustancial de los miembros del gobierno y al director de su gabinete. Con el cambio de gobierno se abre una nueva etapa en la legislatura, que a buen seguro concluirá a final de 2023.

Los nuevos miembros del gobierno tienen unas notas comunes de las que extraer algunas consecuencias. Las nuevas ministras y ministros son "personas de partido", de esos acostumbrados a trabajar de lunes a viernes, y recorrer los fines de semana el territorio haciendo actos, reuniones, mítines y teniendo contacto con una realidad que es mucho más plural y diversa que la que se vive en Madrid y entre las cuatro paredes de un ministerio. Son personas a las que no hay que explicar, lo saben porque lo han vivido, que la política en determinados niveles exige sacrificios y desvelos que van más allá de lo razonable. Además, algunas de las personas que han entrado en el nuevo equipo de Pedro Sánchez no le acompañaron en su exitosa reconquista de la secretaria general del partido. Y este es otro dato significativo, un gesto a mi parecer con el que el secretario general del PSOE ha querido abrir una nueva etapa, integrando a todos los cuadros útiles y comprometidos con el proyecto socialista, con independencia de su procedencia o simpatías inmediatamente anteriores a esta etapa. Lo destacable de los nuevos miembros del gobierno no es con quien estuvieron, sino que siempre fueron socialistas. De alguna manera este cambio de gobierno, con caras nuevas y políticos comprometidos, inaugura un tiempo de recuperación, de vuelta a la normalidad y la movilidad, de crecimiento económico y creación de empleo. Cambios de gobierno ha habido muchos a lo largo de nuestra democracia y los seguirá habiendo, pero el que hemos vivido en estas semanas tiene un carácter simbólico y temporal que marcará un antes y un después en el destino de la legislatura y en el resultado de las elecciones de 2023.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios