En abril de 1912 Antonio Machado publicó ‘Campos de Castilla’. Dentro de esta obra están los ‘Proverbios y cantares’. El número XXIV, primera parte, dice “De diez cabezas, nueve embisten y una piensa. Nunca extrañéis que un bruto se descuerne luchando por la idea”. Después de las elecciones del 23 de julio, seguimos con la lidia para la investidura del presidente del gobierno. En el ruedo de pitones afeitados en el que estamos, más parece embestidura. El Minotauro que presume manoseando la Moncloa, cuando no anda de paseo por Marruecos gracias a la amable línea aérea Pegasus, embiste para ser investido. Carece de belleza y honor. Por eso no duda en clavarnos a los españoles sus banderillas de ruina y autodestrucción. Son preocupantes los picadores que nos exhiben con insistencia. Peores son los apoderados ocultos que negocian en mohosos callejones, lejos de la plaza de nobles instituciones que deben gobernar España. Dice el diccionario de la RAE que embestir es: “Ir con ímpetu sobre alguien o sobre algo”. Como el nacionalismo catalán y vasco no se cansa de hacer daño, embisten contra el proyecto histórico y político que nos ha unido a los españoles durante siglos. Antes de 1492 y después también. Ahora bien, desde el 12 de octubre de 1492 nos une en el ámbito de nuestro proyecto de civilización; la Hispanidad. Nunca olvido lo que nos enseña Sor Juana Inés de la Cruz (Virreinato de Nueva España, México, 1648-1695) “Estudio no para saber más sino para ignorar menos”. Llegó el mes de Augusto César. Y aquí estamos ¡será por rufianes! Sobran bellacos, gorrones y truhanes entre sus socios de coalición pobresista. A todos le une su profunda aversión a la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley, cimiento principal sobre el que se construye la democracia. También ambicionan acabar con la Nación española. Repartírsela por parcelas donde imponer sus dictaduras racistas. Por eso necesitan segar hoz en mano el conocimiento de nuestra historia. Por eso aspiran a encadenarnos a la miseria moral e intelectual con su martillo sectario. ¿Y la patricia oposición? ¿y los togados miembros de la élite del poder de la ‘piel de toro’? Descabellándose tras los burladeros. España es nuestro hogar y responsabilidad. Por toda su historia merece que la subamos a nuestros hombros y salgamos unidos por la puerta grande que son la dignidad y la libertad.