Quienes tengan niños en casa habrán escuchado mil veces la canción esa de "un cocodrilo que se metió en su cueva, de pronto asomó la cabeza, miró para un lado y el otro...". Es uno de los tantos vídeos protagonizados por CantaJuego que sirven de entretenimiento a los infantes en sus primeros años de vida. Una canción sin más, que me ha venido a la cabeza al pensar qué pasará en septiembre con la vuelta al cole: ¿podrán los niños ir a las aulas con total seguridad o muchos padres optarán por desobedecer y dejarlos en casa?

La cuestión es clave: un año entero sin formación reglada en la vida de un niño puede ser fatal para su desarrollo. Como también lo sería el quedar alejado de sus compañeros de clase durante tantos meses. Es aquí donde volvemos al cocodrilo que se metió en su cueva. ¿Queremos que este y otros dibujos en bucle en la TV sean la única compañía de los pequeños este curso? La respuesta está clara: no. Por eso es impredecible tener ya un protocolo claro y eficaz para que los niños vayan al colegio. Por cierto, el cocodrilo al final... ¡se sorprendió!