
La tribuna
José María Martínez de Haro
Entre la honestidad y los klinex (I)
Mis cosas
Se acaba de cumplir un año de la muerte de Eduardo Cruz. Un escultor fascinante de Macael, que los últimos años de su vida los pasó entre su pueblo y Aguadulce donde tuvo un piso. Estuvo media vida viviendo en Los Ángeles, haciendo esculturas para gentes muy famosas, pero un buen día decidió que tenía que volver a su Macael del alma. Falleció hace un año pero realmente me enteré meses después por una amiga, Elena Pastor.
Recuerdo que hablamos la última vez hace ya más de cuatro años y Eduardo me volvió a contar parte de sus vivencias y las cosas que la vida le había proporcionado. Lo mejor sin duda, su esposa Rosalía y sus hijos. Pero el arte siempre lo acompañó. Eduardo Cruz era un ser bondadoso, pocas veces he conocido a una persona tan cariñosa y tan agradecido. Por eso disfrutamos de su presencia y de su obra en las exposiciones que hizo en Almería y en Roquetas de Mar. Hoy quería recordarlo porque estoy seguro que muchas personas no conocen que Eduardo ya está dando abrazos en el cielo desde hace un año. Nunca olvidaré cuando me presentó en Macael a la actriz Assumpta Serna.
Y ahora que llega julio, pues recuerdo a un buen amigo, a un actor que un día decidió vivir en la provincia de Almería. Eduardo Fajardo, hará ahora seis años que falleció en México. Vivió durante muchos años en Mojácar y luego se trasladó a Huércal de Almería.
Lejos de las cámaras y de la acción, el actor que trabajó en muchísimas películas hizo una excelente labor con las personas discapacitadas, acercándolas al mundo del teatro. Aquel último café en el Barea en la Plaza de San Sebastián, hizo que durante más de dos horas habláramos de proyectos, de ideas y de ilusiones. Todo al final, se quedó en eso. Con su silla de ruedas lo recorría todo y las personas lo saludaban y lo paraban para mostrarle su cariño.
Hoy quería recordar a dos grandes artistas, dos Eduardos que llevaron el nombre de Almería por el mundo. Su recuerdo queda latente porque hicieron mucho por esta tierra.
Esta semana se ha inaugurado la Casa del Libro en Almería. La afluencia ha sido sorprendente, que gran aceptación ha tenido esta librería, que es un lugar de encuentro. Noticias culturales de esta índole son siempre un motivo de alegría.
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