Gádor despertó al alba en una jornada especial, segundo domingo de febrero, ese que cada año pone a la localidad en el centro de todas las miradas desde los otros 102 municipios de la provincia. Duodécima edición la celebrada ayer del Día de la Naranja, la fiesta que tiñe de ese color el municipio en la misma fecha desde hace doce años.

Había invitado a todos los almerienses su anfitriona, la alcaldesa Lourdes Ramos, y la convocatoria fue respaldada. Supo a cítrico en toda la villa y se extendió su aroma por los rincones que forman el Bajo y Medio Andarax. “Es un día muy importante para Gádor y para toda la provincia. Cumplimos ya doce ediciones y mantenemos intacta la ilusión como si fuese la primera”, había anticipado la primera edil en la información previa publicada horas antes del festejo en las mismas páginas que hoy leen.

"Es un día importante para homenajear a la naranja, que crea riqueza y trabajo”, Carlos Sánchez, diputado de Promoción Agroalimentaria

La lluvia fue una aliada más. Si se miraba al cielo no se podía atisbar rastro de la temida agua, tan necesaria por otra parte. Temían quienes durante los últimos doce meses han preparado con esmero la fiesta que pudiera quedar deslucida. Nada más lejos de la realidad, la Villa de Gádor lució radiante.

La fuente de zumo, una de las más buscadas.

A la hora en la que iba rugiendo el estómago, un premio, reconocimiento a un vecino ilustre con trayectoria de gran importancia para todos los gadorenses. La Naranja de Oro recayó en José Antonio Alcaraz “como reconocimiento a su labor por recuperar el vergel de naranjos”, según justificó la titular del Consistorio tras conocerse su elección. A diferencia de otras entregas de premios celebradas durante el fin de semana no hubo sorpresa ni ‘La Sociedad de la Nieve’ birló el reconocimiento. Alcaraz pudo celebrar el que es un galardón a su apuesta por los vecinos y al trabajo por construir un mejor Gádor.

"Gádor y el conjunto del valle lo son del azahar y de la naranja y se debe mantener”, Antonio Mena, Delegado de Agricultura de la Junta de Andalucía

“Cuando vemos que hay zonas que se están perdiendo, José hizo una apuesta por nuestro pueblo y ha recuperado muchas fincas con una gran producción de naranjas que saca adelante con mucho esfuerzo y tesón”, defendió la mandataria gadorense.

Y para este lunes post-festivo, el descanso, el reposo después de unos días intensos. Las fiestas se acumuló la pasada semana en la Villa, que vivió el Jueves Lardero hace cuatro jornadas. “Ya descansaremos del ajetreo la semana que viene”, prometió la regidora. Se espera que se cumpla.

Naranjas y más naranjas en su día.

Habrá quienes leyendo la crónica tengan el antojo de teñirse de naranja ellos también. Perdida la oportunidad de realizarlo en 2024 deberán esperar aún 365 días, uno más pues el año vigente es bisiesto, para poder experimentar el enamoramiento cítrico. No tendrán ni la excusa de no conducir, pues se pusieron ayer dos autobuses especiales desde la capital.

Una fiesta que se actualiza

La renovación es siempre necesaria en una fiesta que pretenda seguir vigente. El ‘Día de la Naranja’ sentó cátedra este año sobre cómo seguir buscando nuevas metas. Una de las primeras actividades a estrenar, la mejor naranja de la campaña, elegida directamente por quienes cultivan la tierra. “Agricultores de la villa participarán en este evento aportando una malla con seis naranjas totalmente precintada y un jurado de fuera de la localidad será el encargado de juzgar su sabor, la textura, la cáscara, el olor y otros parámetros para elegir la mejor naranja”, explicó Lourdes Ramos, mandamás del Ayuntamiento.

Tradición e innovación se fusionan en la fiesta.

La naranja es una protagonista aún más valorada cada año. A la fuente de zumo o los clásicos papaviejos de naranja se sumó una distinción para un sector primario tan sufrido en los últimos tiempos. Una fruta que es símbolo del Bajo Andarax y que recibió ayer el conveniente apoyo de todos los vecinos, un homenaje para que en tiempos adversos sigan trabajando con el mismo impulso los productores.

Junto al merecido reconocimiento, un mercadillo reforzado para todos los asistentes que sumó presencia de comerciantes de las zonas del entorno, Granada y Murcia. La dirigente política destacó en el calentamiento a la fiesta “el crecimiento que va a experimentar el mercadillo que este año contará con puestos de Granada y de Murcia y que abarcarán desde la gastronomía hasta la artesanía”, lo que se disfrutó con especial ímpetu en la jornada de este domingo.