El Ayuntamiento de Adra ha solicitado al Gobierno de España que se acometan “cuanto antes” las actuaciones pertinentes para la regeneración de la costa entre La Caracola y Guainos, que ha sufrido un gran deterioro por el oleaje y las rachas de viento de los últimos meses. Una petición que ha presentado el equipo de Gobierno en forma de moción en la última sesión plenaria, celebrada este pasado lunes, y que fue respaldada por unanimidad, con el voto a favor del conjunto de la Corporación Municipal.

El alcalde, Manuel Cortés, ha explicado que la zona costera ubicada entre las barriadas de La Caracola y Guainos, que pasa también por el Lance de La Virgen, necesita de “una actuación inminente” para “salvaguardar la línea de costa”. Y es que este tramo del litoral abderitano que conecta varios núcleos, presenta “una clara tendencia erosiva, que han hecho necesarias sucesivas aportaciones de arena con el fin de frenar su progresivo retroceso”.

Una regresión que, tal y como ha recordado el primer edil “se consiguió paralizar en varios puntos” cuando en el año 2015 finalizaron las obras de urgencia para la construcción de espigones en las citadas barriadas, que “de no haberse efectuado tales operaciones, la erosión habría conducido a la desaparición de las playas y las edificaciones, por lo que han permitido dar protección y seguridad”.

“Consideramos que esta actuación es vital para el municipio y para el cuidado de su costa, es una cuestión estética y, por supuesto medioambiental, pero sobre todo lo consideramos importante porque se acerca la época estival y vecinos, vecinas y visitantes merecen tener una costa cuidada y segura para disfrutar del buen tiempo en un lugar idílico, como lo son nuestras playas, y que esté en las mejores condiciones”.

Recientemente, el Ayuntamiento requirió al Servicio Provincial de Costas una petición para reiterar la necesidad de proteger el levante abderitano. Una petición centrada en el tramo comprendido entre el margen izquierdo del Río de Adra hasta el camino del Cauce Antiguo, al considerarse uno de los más afectados, donde se localizan grandes roturas de escollera, desestabilización de espigones e inaccesibilidad vial a las playas del Camping, de Las Cañadas y de Las Albuferas.