El Ayuntamiento de Adra, "para que se respire, de alguna forma, el ambiente de esta fiesta religiosa, y que los vecinos desde sus ventanas o balcones puedan sentir la presencia de la Semana Santa", organizará a los vehículos de servicios municipales, Policía Local, Guardia Civil, Protección Civil y ambulancias del centro de salud para realizar los recorridos procesionales de Semana Santa.

Según concreta en una nota de prensa el Ayuntamiento, este desfile se llevará a cabo tras su ya tradicional salida en agradecimiento a los ciudadanos por permanecer en casa y la lleva a cabo "para conmemorar la Semana Santa 2020 y mostrar su solidaridad con los hermanos y cofrades del municipio", ante las circunstancias excepcionales derivadas de la crisis del Covid-19, que ha obligado a suspender los actos de esta fiesta.

Lo harán a partir de las 20,15 horas de la tarde y saldrán desde la puerta de la Iglesia Parroquial Inmaculada Concepción para realizar cada día la estación de penitencia de la cofradía que tuviera previsto salir ese día, acompañados por sones de Semana Santa a través de la megafonía de servicios municipales.

Por otro lado, desde el Ayuntamiento, se emitirán por megafonía algunas de las marchas típicas de esta festividad en horarios predeterminados.

Así, resonará la música que acompaña a La Borriquita y del Cristo de la Humildad y de la Virgen de la Esperanza el domingo en horario de mañana y tarde.

El Martes Santo será el turno de la melodía del Cristo del Prendimiento y la Virgen de la Amargura, mientras que el Miércoles Santo sonará la del Nazareno y la Virgen de los Dolores, el Jueves Santo será el turno del Cristo de la Expiración y la Virgen de los Dolores y el Viernes Santo los vehículos emitirán la marcha del Santo Entierro y de la Virgen de los Dolores.

Finalmente, el Domingo de Resurrección sonará la marcha de la procesión de la Inmaculada Concepción y del Cristo Resucitado.

El alcalde de Adra, Manuel Cortés, ha explicado que "son muchos los hermanos y cofrades que a lo largo del año preparan con esmero e ilusión esta festividad", y no querían "que ni ellos ni devotos tuviesen que renunciar a algo que llevan en la sangre".

"La crisis sanitaria que estamos viviendo puede paralizar nuestras vidas en muchos aspectos, pero está en nosotros saber darle la vuelta y adaptarnos, por eso hemos querido encontrar una opción con la que poder aunar nuestro deber como ciudadano, que es quedarnos en casa, y el disfrute de esta celebración tan esperada para muchos", ha dicho.