Tras un segundo año consecutivo de pandemia, la Asociación NOESSO de Vícar ha doblado sus esfuerzos para adaptarse a la situación excepcional y seguir proporcionándole una atención profesional y de calidad a las más de las 2.500 personas que han sido atendidas en alguna de sus áreas durante el año 2021.Enfrentarse a la COVID-19 ha sido todo un reto, pues en algunas ocasiones se han visto desbordados a causa de los confinamientos pertinentes entre las personas usuarias, así como entre los miembros del equipo.

No obstante, a pesar de las dificultades, han continuado prestando servicio diario en sus tres áreas: atención de adicciones, inclusión de jóvenes e inserción laboral.

Todo ello, ha sido posible gracias, entre otras medidas, a la apuesta por la formación continua que se ha realizado desde NOESSO invirtiendo más de 5.000 euros en la actualización de conocimientos de su equipo.Desde hace más de 30 años, en NOESSO trabajan con personas con problemas de adicciones tratando de dar respuesta al sufrimiento humano, a las necesidades sociales y educativas.

Desde su centro de información, diagnóstico y tratamiento ambulatorio han atendido a un total de 306 personas. Además de este centro, cuentan con otros recursos como una comunidad terapéutica, una vivienda de apoyo a la reinserción (VAR) y un centro de día.

Durante el recién finalizado 2021 han ofrecido un acompañamiento integral a un total de 92 personas en su Comunidad Terapéutica ‘La Quinta’ y a 17 en la vivienda de apoyo a la reinserción.

NOESSO cuenta actualmente además con el Área de Inclusión de Jóvenes ‘Paco Fernández’ destinado a menores con trastornos de conducta graves y el Área de Inclusión de Jóvenes ‘La Fuente’, para menores en conflicto social.

En cada uno de ellos realizan intervenciones individualizadas e integrales hacia los menores que les permitan superar los comportamientos conductuales disruptivos y posibiliten el aprendizaje de alternativas saludables y adecuadas a estos.

La asociación llevaba más de un año reclamando un profesor que se haga cargo de la formación académica de los menores que por sus condiciones especiales no acuden al Instituto de Educación Secundaria. Durante este periodo, ha sido su propio equipo el que asumió el apoyo formativo de los chicos y chicas hasta que, recientemente, se produjo la incorporación de la persona designada por la Delegación de Educación.

Por otra parte, también es necesario destacar que la pandemia ha repercutido enormemente entre algunos de sus menores. Todo el trabajo efectuado se vio afectado por un confinamiento de tres semanas que imposibilitó las actividades en el exterior, limitó la relación entre compañeros y compañeras y tuvo su impacto, por tanto, en la evolución positiva de los menores.