La luz al final del túnel comienza a vislumbrarse en la Hermandad del Paso Negro de Huércal-Overa. El próximo 23 de marzo será una jornada que pasará a los anales de la corporación huercalense y quedará ya marcado en sus efemérides. Y es que dicho día a las 11:30 horas de la mañana, el Obispo de Almería, Adolfo González Montes, consagrará y bendecirá la Ermita de la Virgen del Río, copatrona del municipio.

La nueva ermita-santuario está situada en la antigua Carretera Nacional de la Villa, entrando por el puente de Parias. Se ubica entre los barrios del Calvario y la Era.

El nuevo templo se ha convertido en una realidad tras meses de duro e incesante trabajo y, sobre todo, gracias a la generosidad del pueblo de Huércal-Overa y devotos de otros municipios, los cuales con sus donaciones han hecho realidad la construcción de la ermita. También hay que mencionar que dicha obra ha sido posible gracias al trabajo y esfuerzo físico de estos mismos devotos de la Santísima Virgen del Río. También la Parroquia de Huércal-Overa y el Ayuntamiento huercalense han aportado su granito de arena para que este ilusionante proyecto sea ahora toda una realidad.

Hay que recordar que esta ermita acogerá en su interior a la Santísima Virgen del Río, imagen de gran arraigo entre los huercalenses y que despierta el fervor durante todo el año. La antigua ermita desapareció en la riada del año 1973, llevándose consigo a la anterior imagen de la Virgen del Río, quedando esta devoción local sin imagen física para los desfiles procesionales, con lo cual se encargó una nueva talla mariana para continuar con la veneración a esta advocación de la Virgen del Río.

La titular mariana ha sido coronada dos veces, siendo la primera talla coronada en 1965 y la actual imagen en 2015, reconociéndose oficialmente como copatrona del municipio.

Así pues, la devocional imagen será venerada a partir del 23 de marzo en este nuevo enclave. Solo será trasladada para sus procesiones anuales, regresando tras estas a esta nueva sede, en la que todos los huercalenses podrán rezarle y pedir sus súplicas. La talla volverá a tener su propia ermita tras 46 años sin esta. Será trasladada toda vez que esté consagrada y bendecida la misma. La imagen volverá al centro neurálgico de la Villa apenas unas semanas después, en el mes de abril, para realizar su Estación de Penitencia la tarde del Viernes Santo.