Amigos del Parque cuelga las botas de monte hasta mediados de enero

La sección de senderismo de Amigos del Parque Natural Cabo de Gata- Níjar, asociación conservacionista con 25 años de actividad, ha dado por finalizado su calendario de salidas de 2021 con la ruta San Pedro y la costa de los piratas, que recorrió las calas de Enmedio, del Plomo, San Pedro y del Cuervo.

Los senderistas salieron desde Agua Amarga y subieron el Cerro del Cuartel. Dejaron a un lado la Cala de Enmedio. A través del sendero que discurre por el Cerro de la Higuera llegaron a la Cala del Plomo. Desde allí subieron a la Rellana de San Pedro. Avanzaron hasta la Cala de San Pedro, en la que pararon a descansar y a comer.

Después tomaron el sendero y camino que les llevó hasta Las Negras, pasando por el Cerro Negro. Avanzaron hasta la Cala del Cuervo y ascendieron por el Cerro de la Molata que, una vez bajado, les condujo al Playazo, de donde partió la ruta.

Los participantes completaron, de esta forma, una distancia de 16,5 Kilómetros con un nivel de dificultada medio y un desnivel acumulado de subida de 588 metros y 597 metros de bajada, con un altitud máxima de 247 metros. Esta ruta por una zona de costa que antaño fue muy frecuentada por piratas cierra la agenda de salidas al Parque Natural Cabo de Gata- Níjar de este año 2021.

Amigos del Parque Natural recuperó su calendario senderista el pasado mes de octubre, con la ruta Cortijo del Fraile- Barranco de Requena- Cerro de Peñones, después de 19 meses y 9 días de obligada inactividad debido a la pandemia de la COVID-19 que comenzó a correr, en su caso, con la suspensión de la ruta San Pedro y la costa de los Piratas el 15 de marzo de 2020.

Amigos del Parque creó esta sección de senderismo en 1999. Desde entonces, ha organizado quincenalmente rutas por este espacio natural con la intención de conocerlo o redescubrirlo, siempre con el saludable deseo de unir deporte y naturaleza.

“Un estudio liderado por investigadores de la Universidad de Sídney confirmó que caminar a un ritmo rápido reduce en un 24% el riesgo de mortalidad por cualquier causa, mientras que andar a un ritmo normal se asocia a una reducción del 21%”, según recuerda Juan Manuel J