El acceso en coche a Genoveses y Mónsul, en el Parque Natural, costará 6 euros este verano

La Delegación Territorial de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul de la Junta de Andalucía en Almería va a elevar a seis euros el precio para acceder en coche desde el 17 de junio y hasta el próximo 24 de septiembre a las playas naturales situadas a poniente de la barriada de San José y comprendidas entre la de Genoveses y Cala Carbón, situadas todas ellas dentro del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar.

La administración autonómica ha comenzado ya con los preparativos para articular el dispositivo de control de acceso a estas playas y calas, sentido en el que propone al adjudicatario del servicio establecer una tarifa de seis euros por vehículo “dado el incremento de los precios generalizados”, si bien la tarifa final quedará determinada por la oferta de la concesionaria que no podrá superar esta cuantía toda vez que una tarifa inferior a 4.5 euros se “considera anormalmente baja”.

Excepto en los años en que la Junta de Andalucía ha financiado la prestación del servicio, el precio que se ha cobrado al usuario final ha sido una tarifa fijada en la cantidad de 5 euros. Este ha sido el precio ofertado por la empresa adjudicataria del contrato, según se recoge el estudio de viabilidad económica financiera consultada por la agencia de noticia Europa Press.

El contrato se desarrollará durante 100 días - una semana menos que en 2022 y las previsiones de recaudación se sitúan en una cantidad aproximada a 345.000 euros a un coste de 6 euros por vehículo en el supuesto de que se mantenga la demanda media de años anteriores, con 590 vehículos diarios en rotación para un espacio que soporta un máximo de 399 vehículos estacionados el mismo tiempo.

Según los datos que maneja la Junta, el número de coches que accedieron a las playas protegidas durante la temporada de 2022 ascendió 517,5 vehículos con un máximo de 624 vehículos diarios en agosto. La mayor rotación media diarias de coches, furgonetas y otros vehículos se remonta a 2018 cuando la barrera de control se levantó para facilitar 667,5 accesos de media al día con hasta 800 accesos diarios de media solo en el mes de agosto.

Desde el Gobierno andaluz, a la luz de estos datos, señalan que la demanda del servicio es “bastante estable en términos cuantitativos” por lo que prevén que para este verano “se va a mantener entre 500 y 600 vehículos diarios”. La empresa adjudicataria obtiene beneficios a partir del vehículo número 451, según el estudio para una tarifa de 6 euros y considerando unos costes totales de 223.259,85 euros, sin contar el beneficio industrial del 6% del total de costes.

El informe da cuenta además, conforme a la memoria de ejecución del dispositivo en años anteriores de la “larga cola vehículos que, desde las primeras horas del día y durante gran parte de la jornada, se agolpan en la barrera de acceso a la zona restringida”. De modo que lo normal en los meses ee julio y agosto es que el aforo de vehículos se complete antes de las 10:00 horas” y que durante el periodo “muchos visitantes no puedan acceder en su vehículo particular al área restringida por encontrarse completa”.

El contrato de adjudicación del servicio se realiza a través de un procedimiento negociado sin publicidad y lleva aparejado además del acceso y ordenación del tráfico, el mantenimiento del ecosistema natural e información medioambiental a los usuarios, la dotación de aseos y la disposición de sombrajes, entre otras.

La resolución restringe durante este mismo periodo de tiempo la actividad recreativa de piraguas, kayaks y similares artefactos sin motor a un número máximo de cinco que, sin necesidad de autorización expresa, se agrupen en zonas del litoral del Parque Natural. La actividad recreativa, sin ánimo de lucro, llevada a cabo por la agrupación de un mayor número de artefactos requerirá autorización expresa de la Junta de Andalucía. El documento establecerá las condiciones que garanticen la preservación del ecosistema litoral y el uso del dominio público marítimo terrestre, salvo cuando la actuación sea para preservar la vida humana en el mar.