La Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible ha anunciado su intención de poner en marcha del proyecto piloto de conservación y restauración de praderas de posidonia oceánica del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar, afectadas por bloques de hormigón y otros elementos asociados, que funcionan como estructuras de anclaje para fondeo no regulado.

El Gobierno andaluz tiene previsto actuar en dos franjas marinas poco profundas para intentar eliminar los factores que alteran el estado ecológico de este sistema natural acuático que, junto a la vegetación de las marismas mareales, ha demostrado ser un importante sumidero de CO2.

La Junta contempla medidas para una superficie de aproximadamente 11 hectáreas ubicadas en Agua Amarga -unas ocho hectáreas- y La Isleta del Moro- alrededor de tres. Las densas praderas de posidonia que pueblan esta zona tiene una capacidad estimada de absorción de 645 toneladas de CO2 durante los 50 años de plazo que contempla el proyecto.

Las praderas de posidonia pueden llegar a capturar de tres a cinco veces más dióxido de carbono que los bosques tropicales y, además, son capaces de retener este compuesto durante miles de años para evitar que vuelva a la atmósfera. La absorción de carbono azul (carbono capturado por los océanos y ecosistemas costeros) se muestra actualmente como una medida de gran eficacia para luchar contra los efectos del cambio climático.

La Junta trabaja para que los proyectos centrados en la restauración y conservación de estos hábitats naturales puedan incluirse en el mercado voluntario de compensación de emisiones de carbono y apuesta por la colaboración público-privada para poner en marcha iniciativas como estas que aprovechan las características y capacidades propias de la costa andaluza en la lucha contra el cambio climático y que forman parte de la Revolución Verde emprendida por el Gobierno autonómico.

Desarrollo Sostenible ha presentado ya estas iniciativas al sector privado y administraciones con capacidad de gestión en materia de compensación de emisiones para poder conocer su opinión al respecto y numerosas empresas se han interesado por participar en estos proyectos voluntarios.

La iniciativa de la Junta, que también intervendrá en la marisma de la Bahía de Cádiz, ha sido presentado como un proyecto pionero en Europa en el mercado voluntario de emisiones de carbono azul (carbono capturado por los océanos y ecosistemas costeros), que se ha convertido en una medida de gran eficacia en la lucha contra los efectos del cambio climático. Se incluye en el catálogo del Sistema Andaluz de Compensación de Emisiones (SACE) y permitirá a las empresas privadas invertir en proyectos de recuperación de espacios del litoral andaluz que les ayude a compensar sus emisiones de gases de efecto invernadero.

“El proyecto nos parece una buena noticia para la conservación de la biodiversidad de la flora y la fauna de las aguas del Parque. Ahora lo que procede es hacer el seguimiento de cómo se va desarrollar el proyecto, conocer más pormenorizadamente como serán esas boyas y en qué plazos se llevará a cabo y la forma en que se gestionará el fondeo en esas playas urbanas” valora esta Asociación en el último número de su revista ‘Eco del Parque”.