El equivalente a 13 campos de fútbol. Esa es la superficie de suelo que, repartido por algunos de los principales territorios de población dentro del Parque Natural Cabo de Gata- Níjar, está disponible para construir según el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) de este espacio.

Esta es una de las valoraciones sobre las consecuencias de estas dos figuras de planeamiento que ha realizado la Asociación de Amigos del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar y ha recogido en un exhaustivo informe. “Esta normativa resultó tan nefasta para la conservación del espacio natural protegido, que tras su publicación que, además de otras dos asociaciones (Ecologistas en Acción y Salvemos Mojácar y el Levante Almeriense) no dudamos en impugnarla en los tribunales” recuerdan en su exposición.

Los procedimientos judiciales tardaron en resolverse una década. “Durante este espacio de tiempo estuvo vigente la paralización cautelar del desarrollo urbanístico en las zonas urbanas. pero finalmente el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía desestimó las tres demandas, considerando que el Decreto era conforme a derecho”. Amigos del Parque fue la única asociación que recurrió al Tribunal Supremo para agotar todas las posibilidades. El recurso fue admitido a trámite, pero fue desestimado.

La principal consecuencia negativa ” fue la ampliación de los núcleos urbanos, en los que se delimitaban grandes zonas urbanizables y urbanas no consolidadas, en algunos casos de forma escandalosa”, según la valoración de este colectivo. “Estas zonas urbanas quedan excluidas de la zonificación ambiental y por lo tanto al exclusivo control de los ayuntamientos “, añaden.

Otra consecuencia es “la gran permisividad que el PORN establece en todas las zonas B -de regulación especial- y C -de regulación común pero con áreas con un mayor grado de intervención humana en el Parque Natural, en las que tienen lugar usos y actividades de diversa naturaleza-, al considerar que cualquier actuación en estas zonas pode ser compatible o incompatible si así lo determina el correspondiente procedimiento de autorización, en los términos establecidos en la normativa que resulte de aplicación», opinan.

ELPORN establece una serie de objetivos y propone una ordenación y zonificación del espacio con la aplicación de una normativa específica. Así, la zonas A es la de aquellos espacios que albergan ecosistemas paisajísticos o científicos y, que por su singularidad, fragilidad o función requieren un nivel de conservación y protección especial.

Las zonas D son áreas excluidas de la zonificación ambiental “suelos urbanos y urbanizables cuyo desarrollo, a priori, se considera posible siempre que se determine su no afección a los hábitats naturales y especies que motivaron la inclusión de este espacio en la Red Natura 2000”.

San José es “el núcleo de población que más se ha desarrollado desde el punto de vista urbanístico en las últimas décadas y pretende seguir haciéndolo a tenor de la superficie que tiene disponible para ser construida”, según Amigos del Parque.

Rodalquilar no escapa a la “fiebre del ladrillo", según este colectivo. “El antiguo poblado minero, propiedad de la Junta, “está dentro de suelo urbano, por lo que podría haberse rehabilitado manteniendo la estética original de las construcciones”.

“En Aguamarga hay más suelo libre disponible para construir que suelo ya construido”. En el Pozo de los Frailes, “ hay previsto un importante desarrollo urbanístico que tendrá como consecuencia la unión entre la zona urbana consolidada actual y la urbanización de Las Casillas” advierten.

Sobre Fernán Pérez se recuerda que” esta formada por dos núcleos urbanos separados entre si unos 200 m. Está previsto que los dos núcleos queden unidos entre si mediante construcciones.” Y en Las Negras “ existe mucha superficie de suelo urbano consolidado aún por construir, pero además de eso, hay una gran reserva de suelo urbanizable” señalan.