San Isidro y Rodalquilar vuelven a recuperar la sonrisa con sus fiestas
Níjar
Los dos núcleos han celebrado sus tradicionales festejos en los que la alta participación vecinal ha sido el denominador común
El patrón de los agricultores volvió a procesionar este domingo
Este pasado fin de semana, los núcleos de población de Isidro y Rodalquilar han recuperado la sonrisa con la celebración de sus fiestas patronales.
En el caso del primero, la celebración de San Isidro Labrador es, sin duda, una de las fiestas grandes de la comarca. Después de dos años de pandemia y con ganas de festejar el fin de la campaña agrícola, la comisión de fiestas de San Isidro preparó un extenso programa repleto de actividades muy variadas en las que han estado involucradas numerosas asociaciones del pueblo, así como artistas locales, y que han conseguido que la participación superase todas las expectativas.
Los festejos, que dieron comienzo el pasado jueves, se alargaron hasta el domingo con la tradicional procesión del santo por las calles de la localidad. Cientos de personas siguieron el recorrido en una última jornada que terminó con el no menos tradicional castillo de fuegos artificiales.
“Era la mejor oportunidad que tenemos para reconocer a nuestros vecinos el papel que han jugado durante estos años de pandemia, porque mientras España y Europa en general se confinaba, aquí se trabajaba todos los días para garantizar productos frescos en los lineales de los supermercados, en cada mesa de cada hogar. Estas fiestas y su completísimo programa son, en cierto modo, el aplauso que debemos a esos otros héroes del campo de Níjar, gente sencilla, trabajadora, que desde su modestia nunca han pedido reconocimiento alguno, pero a los que hay que reconocer lo necesarios que son en el conjunto de la sociedad”, afirma la alcaldesa, Esperanza Pérez.
En paralelo, con igual entusiasmo, se desarrollaron las fiestas de Rodalquilar que comenzaron el viernes,1 de julio, por la tarde, con la procesión del santo patrón, y se prolongaron hasta el domingo, si bien el sábado concentró el grueso de las actividades con torneos deportivos y juegos infantiles, a cargo de Atalayas del Levante. La Casa Social Carmen de Burgos y la Plaza del Tenis fueron los dos enclaves a tener en cuenta si nadie quería perderse la mayoría de las actividades programadas por la comisión de fiestas en colaboración con el Ayuntamiento nijareño.
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