Las guardianas del arte, tradición y folklore nijareño están de onomástica
las Refajonas
Este grupo de baile creado para recuperar el fandango de Níjar, cumple 40 años con actividades que se desarrollarán este fin de semana en la Villa
Refajonas de Níjar reabre el taller de laúd, bandurria y guitarra
El grupo Las Refajonas tienen todo listo y preparado su cuarenta cumpleaños como guardanas del arte, la tradición y el folklotre nijareño con una serie de actividades que se desarrollaran entre este viernes y sábado en la Villa de Níjar.
“Cuarenta años aportando a la cultura popular de Níjar, es una cifra redonda que nos invita a una retrospectiva para valorar lo conseguido, agradecer tantísimo recibido y renovar el impulso hacia el futuro de este legado cultural vivo tan potente” valoran en su web.
Las Refajonas, niñas y mayores, se vestirán de flamencas para deslumbrar al son de su rondalla, junto al Berruguilla y la gran actuación de ✨Alberto Funes al cante acompañado a la guitarra por David de la Fragua. Y el sábado, niñas y mayores, con su rondalla, fundadoras y antiguos componentes ataviados con sus trajes típicos de gala desplegarán su repertorio de bailes y canciones regionales. Todo ello aderezado con vídeos para el recuerdo, sorpresas yreconocimientos.
La Asociación trabaja en mantener viva y divulgar el folclore de los nijareños, expresada mediante sus músicas y danzas tradicionales. y han llevado su arte por bandera con actuaciones. También han organizando eventos y talleres musicales. Se creó en 1985, cuando seis mujeres nijareñas recuperaron el fandango de Níjar, un baile autóctono que se había dejado de bailar durante cerca de medio siglo. Se trata de un baile de galanteo con el cual animaban a las muchachas a bailar. Al aceptar el reto, la refajona no abandona hasta el final, hace sonar las castañuelas y es piropeada, entre tanto, por sus acompañantes. Agradecida, les da una palmada en la mano al retirarse. .
También son célebres los peinados con “moño de atrás” de ocho cabos con peina, dos tortas laterales a modo de pleita del esparto, con tres peinetas, flores y una enredadera natural. El traje de fiesta tradicional está cargado de gargantillas, collares y adornos. Sobre la falda magenta destacan los lazos o “colonias” (bandas blancas paralelas). Con mantón de Manila, este lujoso traje de fiesta tradicional se acostumbra a lucir durante la feria de la Villa de Níjar.
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