La alcaldesa de Níjar, Esperanza Pérez Felices, ha firmado hoy el decreto de Alcaldía por el que autoriza hasta el 50% de ocupación extra en las terrazas de establecimientos en dominio público local, así como la exención del pago de las tasas correspondientes hasta final de año. Los beneficiarios de esta medida deberán programar la nueva disposición de mesas y sillas teniendo en cuenta el derecho de los vecinos, el espacio disponible, itinerarios peatonales y el cumplimiento de las distancias de seguridad marcadas por las autoridades sanitarias. Cuando en la solicitud se incluya la ocupación de espacio destinado al estacionamiento de vehículos será preciso un informe previo de Policía local.

La medida que hace efectiva el equipo de Gobierno nijareño permitirá a los establecimientos contar en la práctica con el mismo número de mesas y sillas que en la situación previa al estado de alarma, pero con mayores distancias entre ellas para cumplir así con las normas de seguridad sanitaria. “Con esta medida de flexibilización pretendemos ayudar a los hosteleros donde más falta hace, en la oferta que pueden poner en práctica desde el primer día. Así, todo seguirá igual salvo que ocuparán más espacio y mientras se haga de manera ordenada, teniendo en cuenta a los vecinos y los flujos de gente, podremos poner en marcha un periodo de recuperación verdaderamente efectivo porque nuestros negocios, en verano, viven en la calle”, afirma la alcaldesa, que pide una especial complicidad de los empresarios beneficiados con esta medida para que la lleven a cabo con la responsabilidad que implica no colisionar con derechos de los vecinos o viandantes.

El segundo aspecto de vital importancia que aparece en el decreto firmado por Esperanza Pérez, es el inicio de los trámites para la modificación de la ordenanza fiscal reguladora de la tasa por ocupación y uso en bienes de dominio público local, al objeto de la suspensión de su aplicación o supresión desde el 14 de marzo hasta el 31 de diciembre 2020. “Esta medida no trata en si misma compensar pérdidas, porque es imposible hacerlo desde el Ayuntamiento, pero ayudará a crear empleo, a incentivar la contratación de personal extra para una mayor ocupación de terrazas sabiendo, además, que por lo menos y en lo que concierne a este año no tendrán que pagarlo”.

En este sentido la alcaldesa ha adelantado que ya se está trabajando con la Junta de Andalucía en el modelo de apertura de playas, para lo que ha participado en la reunión de alcaldes en cuyos términos municipales hay litoral accesible por el público. “Aún queda mucho por resolver, porque las medidas a aplicar no son sencillas para garantizar una correcta limpieza y mantenimiento de las playas con los nuevos parámetros de mantenimiento a los que obliga el Covid19. Estoy segura de que habrá un buen entendimiento entre todas las partes, porque la voluntad de todos es poder abrir cuanto antes y hacerlo con total garantía de seguridad, y a partir de ahí sólo queda diseñar procedimientos y garantizar su viabilidad económica”, afirma Esperanza Pérez.

Níjar adquiere en esta fase de la desescalada un papel de especial importancia en Andalucía, ya que con más de 50 kilómetros de playas practicables entre urbanas, no urbanas y salvajes, y todas ellas dentro del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar, se verá obligada a generar procedimientos específicos para cada uno de estos espacios singulares. “Tenemos que ser conscientes de que por mucho que intentemos limitar los aforos, el efecto avalancha se va a producir, y es en su gestión en lo que tenemos que trabajar desde el primer momento. A partir de ahí debemos tener todos muy claro que necesitamos las playas para que los bañistas ocupen luego esas decenas de miles de metros cuadrados que vamos a habilitar como terrazas. Sencillamente lo necesitamos, y gestionarlo bien es emprender el camino correcto de la recuperación económica y del nuevo modelo de convivencia que toca construir”, concluye la alcaldesa de Níjar.