De todos es conocido que la dieta mediterránea tiene multitud de ventajas, tanto para la sociedad en general como para la salud de sus ciudadanos en particular, sobre todo para prevenir enfermedades de todo tipo, incluidos trastornos mentales, tan en el foco en esta época de pandemia. De ellas ha hablado en su conferencia Alejandro Bonetti, doctor en Medicina, Académico Numerario de la Real Academia de Medicina y Cirugía de Andalucía Oriental, Ceuta y Melilla y Director del Aula Dieta Mediterránea y Vida Saludable, dirigida a la divulgación, difusión e Investigación de la Dieta Mediterránea y que depende de la Fundación RAMAO.

Se ha demostrado que la Dieta Mediterránea tiene especial importancia en la longevidad de los pacientes, ayuda a evitar el deterioro cognitivo, ayuda a prevenir la enfermedad de Alzheimer y tiene efectos anticancerígenos. Pero la trascendencia de la dieta mediterránea va mucho más allá. Y es que su efecto positivo sobre las pandemias que asolan el siglo XXI está más que contrastado: ayuda a prevenir la obesidad; se ha demostrado que los pacientes que siguen una dieta mediterránea tienen un sistema inmunitario más fuerte frente al COVID-19; y su seguimiento de manera masiva por los ciudadanos ayuda a disminuir el cambio climático.

El doctor ha querido incidir en la importancia de la relación intestino-cerebro, en la que nuestra dieta tiene una influencia enorme. “El epicentro de la salud está en el intestino. Hoy sabemos que muchas enfermedades sistémicas, como la fibromialgia o algunas enfermedades autoinmunes, de las que anteriormente desconocíamos el origen, dependen de la alteración de la microbiota intestinal. Hoy conocemos que una dieta mediterránea a base de cereales integrales, probióticos como el yogur, y otros alimentos que se incluyen en este tipo de dieta va a favorecer que tengamos una flora intestinal saludable y estable y nos ayudarán a evitar este tipo de enfermedades”. “Además -prosigue- existe una correlación directa entre flora intestinal y salud mental. Hoy sabemos que muchos cuadros depresivos y de ansiedad son por alteraciones de la salud intestinal”.

Además, la dieta mediterránea tiene una importancia vital para Almería ya que, en palabras del doctor Alejandro Bonetti, nuestra provincia es “el epicentro de la salud europea y mundial”.

Según el doctor Bonetti, la provincia de Almería cumple hoy todos los requisitos para ser la puerta de la dieta mediterránea: somos la huerta de Europa, somos el mayor productor hortícola bajo plástico, referencia mundial en la producción de productos ecológicos. Damos de comer a 500 millones de europeos, 1 de cada 3 mesas europeas consume a diario productos almerienses. Todo ello gracias a lo que se ha llamado el milagro almeriense, el cultivo en los invernaderos fruto de la investigación.

Para comprender la magnitud de todos estos datos debemos centrarnos en la importancia de la dieta Mediterránea, fundamental para llevar una vida saludable hoy en día, que debe entenderse como un modo de vida, un concepto integral que engloba no sólo los productos más adecuados en los que debemos basar nuestra alimentación si no también hábitos como el compartir mesa, es decir, hacer del momento de la comida un momento social o el llevar una vida activa, lejos del sedentarismo, practicando actividad física a diario.

Desde el Aula Dieta Mediterránea y Vida Saludable quieren concienciar a la población de que la adopción y el mantenimiento de la Dieta Mediterránea es clave para ayudar a prevenir futuras enfermedades crónicas no transmisibles, como la Diabetes Mellitus o la obesidad, y para contribuir a disminuir el gasto sanitario, reducir la comorbilidad y evitar efectos secundarios de los fármacos.