El alcalde de Vícar, Antonio Bonilla, ha mostrado su satisfacción por la próxima celebración en el municipio de un nuevo campeonato a nivel nacional. “Una vez más Vícar hace honor a su condición de Villa Europea de Deporte y durante cuatro días acogerá una de las competiciones más prestigiosa de dardos electrónicos como es el Campeonato Nacional de Cricket, organizado por la Federación Española de Dardos Electrónicos (FEDE), en la que será su vigesimosexta edición”. ha señalado Antonio Bonilla, quién ha animado a los vicarios a que acudan a presenciar las distintas tiradas.

Vícar recoge el testigo de A Coruña, para albergar este campeonato que disputará sus distintas competiciones por CDR. Connection Star. Individuales. Parejas. Triples mixtos. Opens y Junior y como colofón el Campeonato Nacional de Cricket por equipos, del 30 de enero al 2 de febrero inclusive. En elloso competirán los mejores deportistas de España de esta disciplina. Un evento contará con representantes de todas las comunidades autónomas, y que como ha señalado Antonio Bonilla, “convertirá a Vícar durante un largo fin de semana, en la capital del dardo electrónico”.

El cricket es una variante del juego de los dardos que consiste en “cerrar” una serie de seis números más la diana, acertándoles tres veces con los dardos a cada uno.

La historia de los dardos empezó en los años 60, cuando comenzó el boom turístico en las zonas costeras españolas. En muchos locales con asiduos clientes ingleses, o que incluso los dueños eran ingleses, se empezaron a colocar dianas para entretenimiento de los clientes. En poco tiempo ya se iniciaban algunas pequeñas ligas locales, con la finalidad de que los clientes fueran conociendo a otros jugadores, y empezara a subir el nivel de juego.

No obstante, la mayor difusión de este juego vino con la invención de las dianas electrónicas en Estados Unidos, en los años 80 (hasta los 90 no llegaron a España), que simplificó mucho el juego, ya que la diana electrónica lleva automáticamente la puntuación, sin necesidad de tener que usar papel y bolígrafo como en las dianas tradicionales o “de pelo”.