La acetilcisteína es un principio activo que se utiliza en medicamentos con propiedades mucolíticas. Puede presentarse de diversas formas, como en polvos para solución oral o compuestos efervescentes.

Este medicamento se pauta para tratar los procesos respiratorios que tienen "hipersecreción mucosa excesiva o espesa", como pueden ser casos de bronquitis aguda o crónica, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), enfisema, atelectasia por obstrucción mucosa o complicaciones pulmonares de la fibrosis, entre otras.

¿Quién puede tomar acetilcisteína en polvo para solución oral?

La acetilcisteína puede ser pautada a pacientes en edad adulta y niños que sean mayores de 2 años. Dependiendo de la edad y las circunstancias particulares de cada pacientes (por ejemplo, que tengan otro tipo de dolencias) su médico indicará cuál es la dosis adecuada y el tiempo que durará el tratamiento.

Por otra parte, este medicamento está contraindicado para personas que tengan alergia a la acetilcisteína o a algún otro de sus componentes. Tampoco debe darse acetilcisteína a menores de 2 años. 

En el caso de las pacientes embarazadas, no se les recomienda el uso de acetilcisteína. Se trata de una medida de prevención, pero podrían usarlo si su médico da el visto bueno tras haber valorado los riesgos y los beneficios. En el caso de comenzar el tratamiento durante el periodo de lactancia, se recomienda decidir entre dejar temporalmente de dar el pecho o evitar el tratamiento con acetilcisteína.

Y durante el tratamiento está contraindicado el uso de medicamentos antitusivos, sales de metales (o espaciar su toma al menos 2 horas). También se recomienda espaciar las tomas si se toman antibióticos como anfotericina B, ampicilina sódica, cefalosporinas, lactobionato de eritromicina o algunas tetraciclinas. 

Se ha de tener cuidado con la administración simultánea de nitroglicerina y acetilcisteína, puesto que produce una hipotensión significativa y un incremento de la dilatación de la arteria temporal. En esos casos se llevará un control sobre los pacientes.

Posibles efectos adversos

Como ocurre con todos los medicamentos, el tratamiento con acetilcisteína puede producir el desarrollo de reacciones adversas en algunos pacientes. Las más frecuentes están relacionadas con el sistema gastrointestinal, pudiendo darse casos de náuseas, vómitos o diarreas.

Las reacciones de hipersensibilidad suelen ser raras, pudiendo ir acompañadas de urticaria y broncoespasmos. Ante estos casos se recomienda interrumpir el tratamiento y consultar con un médico.

En el prospecto del medicamento pueden encontrarse la totalidad de los efectos, en forma de lista e indicando la rareza de su posible aparición.