Criptosporidiosis, los parásitos que puedes confundir con una gastroenteritis común por sus síntomas

Las autoridades sanitarias europeas han emitido un comunicado alertando del contagio masivo de la criptosporidiosis en diferentes países de Europa entre los que se encuentra España con 3.400 casos confirmados, un repunte importante frente a los 815 que se registraron en el 2022. Este virus está catalogado como "potencialmente grave", que ataca al estómago y que se contagia a través de ciertos alimentos o del agua contaminada.

Los casos más significativos se dieron los meses de julio, agosto y septiembre que coincidió con la época de virus gastrointestinales y cuando se concentra más afluencia de gente en determinadas zonas de España como Tarragona donde se ha concentrado uno de los principales focos de contagio el pasado mes de octubre.

Síntomas de la criptosporidiosis

La enfermedad tiene síntomas parecidos a una gastroenteritis común, por lo que provoca diarreas con aspecto líquido y otras molestias gastrointestinales que suelen comenzar entre los dos y diez días después de infectarse.

Por otra parte, hay personas que no presentan síntomas, por lo que la única manera de llegar al diagnóstico es mediante un análisis de las heces. Todo dependerá del sistema inmunitario de la persona, por eso hay que prestar especial atención a niños pequeños y pacientes inmunodeprimidos ya que en los casos más extremos este virus puede ocasionar la muerte.

De igual modo, apúntate los siguientes síntomas por si notas algunos relacionados:

• Deshidratación
• Fiebre
• Calambres y dolores de estómago
• Náuseas y vómitos
• Pérdida de peso

Las personas con criptosporidiosis pueden tener muchos parásitos en las heces un día, pero no tantos al día siguiente. De esta forma, puede llegar a entregarse al laboratorio hasta tres muestras de heces de días diferentes para aumentar las probabilidades de tener un diagnóstico más acertado.

Cómo se contagia

La criptosporidiosis se contagia principalmente a través de la ingestión de agua o alimentos contaminados con oocistos (la forma resistente del parásito) de Cryptosporidium. También puede propagarse a través del contacto directo con heces contaminadas, ya sea de personas o animales infectados ya que esta enfermedad también afecta al reino animal. Algunas de las vías comunes de contagio incluyen:

• Beber agua no tratada o insuficientemente tratada.
• Consumir alimentos o bebidas contaminados con el parásito.
• Nadar en piscinas, lagos o ríos contaminados con Cryptosporidium.
• Tocar superficies o objetos contaminados y luego llevarse las manos a la boca.

Por lo que respecta al tratamiento, la mayoría de las personas se curan entre una y dos semanas. Durante ese tiempo, es importante beber mucho líquido para prevenir la deshidratación, incidencia en los bebés, niños pequeños y embarazadas porque tienen más probabilidades de deshidratarse y deberían recibir más líquidos.

Consejos para evitar el contagio

Los virus son siempre muy contagiosos, por lo que hay que tomar precauciones para evitar su propagación y este que, es especialmente peligroso, requiera más exhaustividad con las medidas preventivas. Toma nota de los siguientes consejos, si no quieres verte contagiarte por este virus que acecha ya a gran parte de la población europea.

• Lavarse las manos frecuentemente con agua limpia y jabón
• Comprobar si el agua del grifo está tratada
• Si no estás seguro, evita beber agua del grifo siempre que sea posible, al igual a la hora de cepillarte los dientes
• No uses hielo en las bebidas
• No te metas en una piscina, si crees que se pueden estar incumpliendo las medias de higiene
• Ducharse siempre después de nadar en el mar o la piscina
• Si tienes diarrea, no te bañes en piscinas en los dos días posteriores a los que hayan desaparecido completamente los síntomas
• No bañes a los bebés en la piscina con pañales normales