"Misericordia es una cuadrilla joven que va a dar que hablar"

Hermano de las cofradías del Silencio, Macarena y Rocío, recuerda sus inicios como costalero y su llegada al mundo del martillo

El capataz en un ensayo de la cuadrilla del misterio de Los Ángeles.
El capataz en un ensayo de la cuadrilla del misterio de Los Ángeles.
José A. García

14 de abril 2014 - 01:00

José Alejandro Suárez es, actualmente, capataz de los pasos de misterio de la Misericordia y del Descendimiento. Anteriormente comandó otros como Sentencia, Esperanza o Doloresd el Entierro.

-¿De dónde le viene su devoción por la Semana Santa?

-Tengo que remontarme al año 82. Con seis años, mi madre quiso sacarme de hebreo en la Borriquita y en el año 83 empecé a salir de nazareno en Estudiantes, donde mi madre salía de mantilla. Nos hicimos hermanos de la cofradía mi madre, mi hermano y yo. Me acuerdo que iba con capa en el tramo infantil. Estuve saliendo desde el año 83 al 91 de nazareno. Hasta que en el año 92 empecé de costalero en la Sentencia porque en la Esperanza no me dejaron (tenía 14 años). La mujer del actual Hermano Mayor, que había estudiado en el Celia Viñas, fue la que introdujo en la hermandad a mi madre.

-¿A que se debió ese cambio de Estudiantes a Macarena?

-Porque mi madre, mi abuela y mis tíos son de la calle Calvario, aledaña a la Plaza de Toros. Por medio del padre del actual Hermano Mayor, que lo conocía por una sobrina suya, me comentó que iba a hacer una cuadrilla para la Sentencia en un paso pequeñito y me animé con solo 14 años (el actual paso de la Virgen del Carmen del Zapillo.

-¿Cómo fueron tus primeros pasos como costalero?

-Empecé en el citado año 92 pero en 1997 me detectaron una malformación arteriovenosa en la cabeza. Me mandaron a Granada y los neurocirujanos me dijeron que tenía que dejar de salir de costalero. Al entrar en esa cuadrilla, estuve muy vinculado, y al tercer o cuarto año empecé a mandar pasos en la cuadrilla. Cuando me detectaron ese problema, el capataz me puso como contraguía.

-¿Cuándo comenzó de capataz?

-Estuve dos años de contraguía, como te he comentado, en 1998 y 1999 y en 2000 y 2001 como capataz del paso. En 2003 no saqué nada y en 2004 cogí el paso del Descendimiento.

-¿Ese nuevo cambio de Macarena al Silencio, a qué se debió?

-Yo empecé a noviar con mi mujer que era del Silencio. En 1992 ya fui costalero del primitivo paso del Camino. Un año más tarde fui costalero fundador de la cuadrilla del Descendimiento, que salió a granadina, pero en 1994 se fundó la cuadrilla del palio del Entierro me pidió el favor de formar la cuadrilla de ese palio. Allí estuve cuatro años y el capataz me nombró segundo capataz cuando me detectaron el problema en la cabeza. La Hermandad del Silencio nos pidió que sacásemos el paso porque tenían problemas de gente y en 2001, entre José Luis Galetti y yo hicimos una cuadrilla y lo sacamos. En 2002 vino una cuadrilla de fuera pagada por la cofradía porque no tenían costaleros. Pero dos años después, viendo que no tenían gente y había venido una cuadrilla pagada, me lo ofrecieron y lo cogí.

-¿Con qué te quedas de tu retorno a la Cofradía de la Macarena?

-Yo perdí la relación con Félix, el que era capataz y Hermano Mayor por aquel entonces y volví a recuperarla. Me llamaron porque la cuadrilla estaba mal y, después de una reunión, llegamos a un acuerdo que si querían hacer una serie de cambios que yo también veía bien pues acepté. Estuve con Félix dos años.

-¿Qué cree que ha cambiado de nuestra Semana Santa?

-Yo creo que la Semana Santa ha mejorado una barbaridad. Si es cierto que el costalero ha tenido unos años de mucho protagonismo, y creo que el tema de nazarenos no se trabaja excesivamente en las hermandades. Se ha dado quizás mucha importancia a los costaleros y poco a lo otro. La puesta en escena en la calle ha mejorado una barbaridad. El tema de cuadrillas ha mejorado también pero creo que no ha mejorado más porque las Juntas de Gobierno no ponen gente válida para mandar los pasos.

-¿Qué opina del patrimonio de nuestra ciudad y la imaginería?

-En temas generales ha mejorado una barbaridad pero hay un sector que no, y creo que el Obispado ha debido de meter mano porque creo que escultóricamente hablando no están para salir a la calle.

-¿Y en el aspecto musical? ¿Cree que ha habido un cambio grande?

-Sin duda. El aspecto musical ha cambiado mucho para mejor. Cuando empecé yo estaba lo que hoy es Santa Cruz, que se llamaba Virgen del Mar. En aquella época también estaba la Agrupación Musical de Las Angustias. También recuerdo la de Los Gitanos de Granada, la de Huécija, etc… En todos los aspectos ha mejorado el aspecto musical. Almería se tiene que sentir orgullosa de la Banda de Cornetas y Tambores que tiene (Santa Cruz), que creo que está infravalorada musicalmente hablando.

-¿Qué mejoraría de la Semana Santa actual?

-El problema que creo es que la Iglesia actualmente en el Mundo está muy mal mirada. Cuesta mucho trabajo. A las cofradías automáticamente las vinculan con las iglesias y tu vas a cualquier iglesia y está vacía hoy en día. Otro problema es que nos viciamos con el comentario de "tal hermandad es un cortijo" pero, sino fuese por dicho cortijo, muchas hermandades no saldrían. El problema es que en algunos sitios esa gente si está bien formada pero en otros no lo está.

-¿Qué piensa del mundo del costal en Almería?

-Pienso que el mundo del costal ha evolucionado pero pienso que el mundo del martillo va por detrás de los costaleros. Ha sido mayor el número de gente de abajo que ha evolucionado que el de fuera.

-¿Cuál es su opinión sobre sus dos cuadrillas?

-Son dos cuadrillas totalmente diferentes. La del Descendimiento ha costado mucho hacerla por el día que es y por ser un paso en silencio pero he tenido la suerte de que ha entrado gente de mucho oficio con la que ha despegado la cosa. Y la Misericordia es una cuadrilla joven que ha empezado. Es en la hermandad donde estoy trabajando más a gusto, donde más facilidades me han dado y más me han apoyado. Si es cierto que es una cuadrilla joven y que va a ser muy grande en pocos años.

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