El entorno del primer templo de la Diócesis almeriense, la Catedral, junto al casco histórico de la ciudad acogió anoche el Vía Crucis General de Hermandades y Cofradías de Almería organizado un año más por la Agrupación. Como anunciamos ayer, la imagen que presidió esta primera cita del ente agrupacionista en esta recién iniciada Cuaresma fue la de Nuestro Padre Jesús de la Oración en el Huerto, el cual fue proclamado en cabildo de Hermanos Mayores debido a que la Hermandad de Estudiantes se encuentra celebrando este año su 75º Aniversario Fundacional.
A las nueve y media de la noche se abrieron las puertas de la sede canónica de esta corporación del Miércoles Santo almeriense para comenzar este Vía Crucis, el cual arrancó con la lectura de monición de entrada. El cortejo estuvo formado por la Cruz de Guía de Estudiantes y más de cincuenta hermanos de la cofradía portando cirio. Tras ello, el cuerpo de ciriales precedió las andas con el titular cristífero, el cual fue portado por costaleros de su cuadrilla bajo las órdenes del capataz general Miguel Ángel Plaza auxiliado por Martín Cayuela y Francisco Javier López. El Vía Crucis estuvo acompañado por los sones de la Capilla Musical Sacra Redemptio.
La lectura de la primera de las catorce estaciones correspondió a la Hermandad de Pasión, en la misma puerta de la Catedral. Hay que recordar que las lecturas fueron facilitadas por la propia Agrupación de Hermandades, eligiendo estas al lector de las mismas. Tras el rezo de la estación, esta cofradía -como sucedió con el resto- se incorporó al cortejo del Vía Crucis situándose las cruces de guía en el centro y los miembros de cada cofradía a los lados de la misma. Después, el Vía Crucis se dirigió hasta el Convento de Las Puras donde la Cofradía del Amor leyó la segunda estación. Caridad hizo lo propio con la tercera estación en las Esclavas de María. La Hermandad de Coronación leyó la cuarta estación en el arco de la Plaza Vieja.
A Encuentro le tocó la quinta estación en la calle Marín y Gran Poder hizo la sexta en el Convento de Las Claras. Borriquita leyó la séptima en la Parroquia de San Pedro mientras que Santa Cena hizo lo propio en la esquina con calle Ricardos. Soledad leyó la novena estación en el Convento de las Esclavas y Resucitado en la puerta de San Pedro el Viejo con la décima.A Unidad le tocó la undécima estación en la puerta de María Inmaculada y la Hermandad del Rocío leyó la duodécima estación en el Convento de las Siervas. Estrella la décimotercera en la Plaza de la Catedral y la última correspondió a la Virgen del Carmen Coronada en la misma puerta del templo catedralicio. Tras el rezo de esta, el consiliario José María Sánchez hizo una breve meditación final y e impartió la bendición a los participantes en el Vía Crucis y resto de fieles y cofrades presentes, dándose por finalizado esta cita.
El Señor de la Oración hizo su entrada nuevamente en la Catedral sobre los hombros de sus costaleros. Allí aguardará un nuevo Miércoles Santo en un año, como decimos, especial para la corporación ya que cumple 75 desde su inauguración. El próximo 12 de octubre, además, será la Salida Extraordianaria de Nuestra Señora del Amor y la Esperanza con motivo de esta efemérides.
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