Los Vía Crucis históricos: origen de la Semana Santa en Almería

QUÉ es un Vía Crucis? En la definición y acepciones del Diccionario de la Real Academia Española (DRAE) el vocablo “Vía Crucis” es el “camino señalado con diversas estaciones de cruces o altares, que se recorre rezando en cada una de ellas, en memoria de los pasos que dio Jesucristo caminando al Calvario”.

Es muy posible que el cómo y el cuando nace la Semana Santa, es decir su origen, sea con los Vía Crucis, aunque aún no podemos establecer un paralelismo directo al menos en Almería, porque es muy difícil de equiparar que aquellas procesiones de finales del siglo XV y el siglo XVI con el concepto que nosotros entendemos en la actualidad como Semana Santa.

En este sentido, el profesor de Antropología de la Universidad de Sevilla Isidoro Moreno explica que «la Semana Santa se va a ir conformando paulatinamente. No hay un año cero. A partir del XVI confluyen varias corrientes: los grupos de disciplinantes que ya existían previamente, la transformación de muchas hermandades de gloria gremiales o étnicas en torno a una advocación, o la transformación de la tradición medieval de las representaciones con personajes vivos de escenas de la Pasión. Y, todo eso, se activa desde el Concilio de Trento, a mediados del XVI».

En la práctica, aquellos penitentes que iban camino de los calvarios o Gólgotas «azotándose y cargando con cruces» (disciplinantes), sí que podríamos entenderlo como uno de los orígenes reales de la Semana Santa. Sin embargo algo va a cambiar en la celebración de estos desfiles procesionales, y es que primeramente los protagonistas en las comitivas de Semana Santa son las personas, los flagelantes, y las imágenes van a tener una importancia muy secundaria, con un crucifijo al final cerrando el cortejo. Eso va ir cambiando para adquirir cada vez más protagonismo las imágenes y las escenas de la Pasión, y en Andalucía también hay que añadir a las dolorosas. Siendo los flagelantes y sobre todo los hermanos de luz los que van a acompañar a las imágenes.

Haciendo alusión a los primeros desfiles procesionales celebrados con antelación al terremoto del año 1522, decir que estos transcurrían por las estrechas calles de la Almedina, ya que en esta zona se encontraba la Catedral-Mezquita, el Ayuntamiento y el Obispado. Según nos dan a conocer los historiadores locales Joaquín Santisteban Delgado y José Ángel Tapia Garrido existía por entonces en la Almedina un Vía Crucis en la noche del Viernes Santo.

Almería disponía en el pasado, al menos que nos conste, de tres vestigios de vía crucis y culminación en sus respectivos calvarios, dos de ellos a extramuros, tutelados por la parroquia de San Sebastián de las Huertas, y un tercero que recorría la ciudad intramuros accediendo por la puerta de la Imagen, en la muralla califal que bajaba por calle La Reina, y que han perdurado en la toponimia urbana de la ciudad:

1. Vía Crucis penitencial intramuros de la Almedina, s. XVIII. Único vestigio que se conserva y muestra los elementos más visibles de la religiosidad popular de la ciudad conventual, con un itinerario devocional que recorrería la cofradía del Santísimo Sacramento o la de Ánimas Benditas, en el barrio de la Almedina. Partiendo de la Parroquia del Sagrario integrada en la Catedral de la Encarnación, con salida por la puerta de los Perdones en donde se rezaría una primera estación, y continuando por plaza Granero, el descampado exento existente entonces junto a la antigua muralla califal, Real de la Almedina, San Juan, San Antón, Cruces Alta y Baja y finalizando en el denominado Calvario de la Almedina, un lugar elevado, a modo de Calvario en la ladera de la Alcazaba, a modo de Gólgota.Solo nos queda una única cruz conservada original, se ubica en la calle Soto en una travesía de la Almedina. Se trata de una cruz en piedra restaurada. Y también podemos contar con dos más, que se han reinterpretado y reconstruido con el Plan Urban del Ayto. de Almería. Una en el edificio de Calle Almedina esquina con Calle La Reina, y la otra existente con prueba documental y aparecida y derribada en una vivienda de la Calle San Juan 26 esquina con Calle Borja.En la denominación de las calles del barrio aparecen nombres que nos recuerdan este camino del Vía Crucis, y que muy probablemente partiendo de la Parroquia del Sagrario catedralicio, ya que nos consta la erección canónica de una Cofradía de Ánimas Benditas, y que eran las organizadoras de estos primeros vía crucis penitenciales hasta el denominado Calvario de la Almedina a la falda de la Alcazaba. Como afirmo calles como Cruces Altas y Bajas, o Encuentro, San Juan, y las propias de San Antón, con Plaza y calle junto a la ermita homónima.El Historiador e investigador Antonio Sevillano Miralles nos informa sobre numerosos datos e informaciones al respecto. Es él el que localiza en el Archivo Municipal de Almería Adela Alcocer Martínez el documento hasta la fecha más antiguo que sobre el tema se conserva, un memorial (legajo 49) fechado el 15 de enero de 1793 de la Muy Noble y Leal Ciudad de Almería.
2. Vía Crucis extramuros del barrio Nuevo y de las Cruces, en la actualidad los barrios de las Huertas, el Distrito 5 de los antiguos Padres Franciscanos y el de Plaza de Toros. Vía Crucis que se iniciaba en la Parroquia de San Sebastián de las Huertas y extramuros, y quedando distintos nombres en su callejero: Cruz, Las Cruces (con dos huellas de cruces ya desaparecidas, una hasta su derribo, en la pared de un colegio-parvulario que existía y era una muy antigua, y la otra también aparecida y derribada en una vivienda de la Calle de Las Cruces esquina con calle La Palma), además de las denominaciones de calles Calvario Bajo y Calvario Alto.
3. Y por último el Vía Crucis extramuros del Paraje del Quemadero entre el Barrio de la Caridad y el Cortijo Fischer- se conocía como Cerro de las Cruces y de las Tres Marías, en recuerdo del Calvario.