La alimentación debe facilitar el yodo necesario para evitar el hipotiroidismo
La deficiencia durante el embarazo puede tener consecuencias irreversibles.
"Andalucía ha sido tradicionalmente una zona endémica de bocio, un trastorno consistente en el aumento del tamaño de la glándula tiroides debido a una deficiencia en el consumo de yodo", asegura el doctor Alfonso Gentil, miembro del Grupo de Trabajo de Deficiencia de Yodo y Disfunción Tiroidea de la SEEN. En la última década se han realizado estudios en Cádiz detectándose una prevalencia de bocio del 29.3%. En Málaga, en la zona de la Axarquía, se determinó una yodaría inferior a 100 ug/dl del 48.5% -la yoduría inferior a 100ug/dl, define la deficiencia de yodo-, elevándose a cerca del 60% en la población adulta. En Jaén se obtuvo una prevalencia de bocio del 20%. Sin embargo, Andalucía está poniendo los cimientos para que estos datos sean más esperanzadores en el futuro, de modo que es junto con Asturias, Galicia y Castilla León, una de las cuatro comunidades autónomas que ha regulado el consumo de sal yodada en los comedores escolares.
Las consecuencias que un infradiagnóstico de esta patología puede tener para la persona afectada pasan por alteraciones del desarrollo orgánico y psicológico durante el desarrollo fetal e infancia, y en la edad adulta, alteraciones de la memoria, apatía, aumento del colesterol, alteraciones del ritmo cardíaco, alteraciones del ritmo intestinal, etc. aspectos a tener en cuenta si se valora que solo el 20% de las personas afectadas está diagnosticada. Éste es el motivo por el cual, La Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), celebra la Semana Internacional del Tiroides, para dar a conocer los trastornos asociados a la glándula tiroides y los síntomas de los mismos a la población general, así como concienciar sobre la importancia de prevenirlos, diagnosticarlos y tratarlos cuanto antes. Se trata de una iniciativa de divulgación que se lleva a cabo en todo el mundo con el auspicio de la Federación Internacional del Tiroides y de otras sociedades científicas internacionales dedicadas al estudio de esta glándula y que en España, está impulsado por la SEEN con la colaboración de Merck. En distintas etapas de la vida, las necesidades del yodo varían, por ejemplo, para una mujer adulta es necesaria la cantidad de 150 microgramos al día, pero si está embarazada, la dosis es de 200 a 300 microgramos, la misma cantidad que necesita la mujer que da el pecho. Durante la gestación, la hormona tiroidea es fundamental para la maduración cerebral del embrión y del feto, motivo por el cual este año la Semana Internacional del tiroides esta enfocada principalmente a las mujeres embarazadas. "Podemos afirmar que hay tres grandes grupos poblacionales de riesgo: los escolares, la mujer en edad fértil y las embarazas", asegura el doctor Gentil.
El hipotiroidismo durante el embarazo se produce en, aproximadamente, el 2,4% de las mujeres. En general, esta afectación se asocia a anemia materna, abortos, desprendimiento de placenta o bajo peso al nacer, además de a una disminución del coeficiente intelectual de los hijos de madres con hipotiroidismo no tratado.
No hay comentarios