La razón por la que los bolis BIC tienen un agujero en el capuchón

Todos tenemos uno por casa o los hemos usado en el colegio, el instituto, la universidad o el trabajo. Los bolígrafos BIC de cristal, o algunas de sus variantes, son unos clásicos insustituibles en el mundo de los productos de oficina. Así el clásico boli de BIC posee varias partes: el tubo de cristal con agujeritos pequeños, el plástico fino relleno de tinta, la punta de plástico y metal con una microbola que permite escribir, el pequeño tapón de cristal que cierra por arriba el utensilio, y por último el no menos importante capuchón del mismo.

En el capuchón podemos observar un pequeño agujero al final que permite el paso del aire. Pero los más antiguos podemos recordar que antes el agujero no existía. El agujero tiene dos funciones básicas: en primer lugar salvar la vida del que pudiera tragarse el capuchón; el tener un agujero permite que pase el aire y evita la asfixia. La segunda de las funciones es impedir que la tinta haga presión por la diferencia del interior y el exterior y se estalle.

El agujero de la etapa se ideó en el año 1993 para tener esa entrada de aire de la que hablábamos líneas arriba.

El origen de BIC

El 10 de junio de 1943, el húngaro (nacionalizado argentino) Ladislao José Biró, patenta en Buenos Aires el "bolígrafo". El nuevo producto fue lanzado al mercado bajo el nombre comercial de Birome (Acrónimo formado por las sílabas iniciales de Biro y Meyne). Al principio los libreros consideraron que esos "lapicitos a tinta" eran demasiado baratos como para venderlos como herramienta de trabajo y los vendían como juguetes para chicos.

En 1943 licenció su invento a Eversharp Faber, de los Estados Unidos, con la entonces extraordinaria suma de 2 millones de dólares; y, en 1951, a Marcel Bich, fundador de la empresa BIC de Francia.

Pero la historia de BIC se remonta a 1944 cuando Marcel Bich y Édouard Buffard crearon la empresa con el objetivo de manufacturar en Francia instrumentos de escritura.

Durante la década de 1950, los diseños se mejoran y la compañía se expande por Europa. Primero se estableció en Bélgica y luego en Italia, Holanda y España, entre otros. Más tarde haría lo propio en Australia, Nueva Zelanda, Estados Unidos y varios países de África y Latinoamérica.