El Almería aún no ha recibido ofertas en firme por los 'apartados'

A falta de tres semanas para que dé comienzo el campeonato liguero (lunes 18 de agosto contra el Albacete), la Unión Deportiva Almería cuenta con media docena de jugadores 'apartados' que se ejercitan al margen en el anexo del Estadio de los Juegos Mediterráneos. Se trata de futbolistas de peso específico como Gonzalo Melero, Lucas Robertone, Édgar González o Luis Maximiano, pero también de otros ya defenestrados como Arvin Appiah o Houbuolang Mendes.

Ninguno de ellos acudió al 'stage' de Marbella junto al resto de la expedición rojiblanca por indicativo del club y hacen un trabajo específico para mantener la forma física a la espera de que llegue algún ofrecimiento en firme por ellos que, según ha podido saber Diario de Almería, al menos hasta ahora no ha producido. En un principio causó impacto por el nombre de alguno, pero la entidad tiene muy claro a estas alturas que en la mayoría de los casos no han ofrecido un rendimiento acorde a la alta ficha que perciben y les tocará salir.

El problema pasa por encontrarles acomodo sabiendo que su mercado es bastante reducido porque los posibles interesados conocen su situación. Tres de ellos, casos de Melero, Appiah y Mendes, cumplen contrato en junio de 2026, por lo que, llegado a un extremo, la UDA podría plantearles una rescisión, si bien antes procurará buscarles acomodo en algún club dispuesto a asumir parte de sus emolumentos.

Melero sonó como posible regreso a la SD Huesca y también se ha rumoreado con el interés del CD Leganés, pero en el club no consta nada, si bien confía incluso en sacar una pequeña cantidad por su venta al tener mercado. En los casos de Mendes y Appiah todo conduciría a un acuerdo de rescisión, mal final por el lado del inglés, una de las grandes apuestas de Turki Al-Sheikh, por quien abonó la friolera de 8'8 millones de euros.

Luego están las situaciones de Robertone, Édgar y Maximiano, los dos primeros con contrato hasta 2028 y el meta luso hasta 2029. Por el centrocampista argentino hizo una tentativa de retorno a su equipo formativo Vélez Sársfield, pero el Almería no aceptó una oferta que no alcanzaba los 4 millones de euros y las negociaciones se rompieron. En el seno del conjunto indálico no hay preocupación por ese asunto, seguramente porque puede tener salida en mercados capaces de afrontar un traspaso mayor.

Lo de Édgar sorprendió a muchos porque fue titular indiscutible para Rubi, pero tiene una ficha muy alta y hay que hacer hueco en la masa salarial. La afición del Oviedo, recién ascendido a Primera, guarda un grato recuerdo de su paso por el Carlos Tartiere. En cuanto a Maximiano, el de Celeirós quizá poseea el salario más alto del equipo junto con Melamed tras concretarse la salida de Luis Suárez al Sporting de Portugal. Se le busca acomodo bajo la fórmula de préstamo y, aunque se habló del presunto interés del Levante, a estas alturas todavía no ha cuajado nada.

Al margen de esta media docena de jugadores, quedarían por solventarse las salidas de Ibrahima Koné, Marciano Sanca y Carlos Rojas. Todo apunta a que el ariete malí se encuentra resolviendo su marcha a un club extranjero tras su fallida cesión al Al-Okhdood saudí. Imposible ya recuperar el retorno de inversión en su caso, pues costó 7'5 millones de euros cuando vino como recambio de El Bilal Touré.

Tanto Sanca como Rojas se encuentran entrenando con el filial a las órdenes de Alberto Lasarte. Por el extremo conquense habría interés del Hércules de Alicante según avanzó Cazurreando para volver a jugar en 1ª RFEF, como ya hiciera el curso pasado en las filas del Real Murcia. Respecto al extremo bisau-guineano no sería de extrañar que afronte el curso en el B en 2ª RFEF tras su escaso protagonismo en el Betis Deportivo dado que bajo la dirección de Lasarte debutó en Primera y ha ofrecido su mejor versión. De ocho a nueve salidas en total (está por ver también lo de Embarba) que la dirección deportiva todavía debe barajar.