Embarba, Chirino y Puigmal sacuden Butarque (0-3)

Adrián Embarba se está paseando por los campos de Segunda División esta temporada. Al extremo madrileño se le queda pequeña la categoría de plata y volvió a demostrarlo en Butarque con un gol que dejó boquiabiertos a los aficionados, locales y visitantes. Minuto 11. Recibe la bola en zona de tres cuartos de campo, recorta a un rival, alza la vista y lanza un obús que sorprende a un Juan Soriano ligeramente adelantado por el efecto de 'folha seca', el balón sube primero y luego baja con violencia para perforar la red del Leganés. El tempranero tanto le ponía de cara al Almería un encuentro en el que no se sintió cómodo desde el principio.

Rubi, quizá buscando frenar la velocidad de Duk al espacio, se pertrechó por primera vez en lo que va de curso con una línea defensiva integrada por cinco efectivos, incrustando a Aridane en el eje junto a Monte y Bonini, pero el plan no salió del todo redondo. Quedó en evidencia que los mecanismos de ese sistema no están todavía bien interiorizados por sus futbolistas y el Leganés le ganó constantemente la espalda a la retaguardia rojiblanca, en la que el central canario sufría particularmente por su exasperante lentitud. Tanto es así que los pepineros bien pudieron adelantarse en el marcador a los 7 minutos merced a un balón en profundidad de Diawara para Duk, que le ganaba la espalda a Aridane, pero su remate final raso y cruzado lo atajaba Andrés Fernández con el pie.

Al poco de esa acción llegaba la obra de arte de Embarba, que ya suma nueve dianas en su cuenta particular, igualando las mejores cifras de su carrera en la competición liguera, logradas en el curso 20-21 en las filas del Espanyol. Fue un chispazo y luego continuó la desconexión total, con constantes acometidas de los blanquiazules, que en el ecuador del primer tiempo pidieron penalti al entender que Bonini le había metido el codo a Duk dentro del área para frenar su avance, no concedido por el colegiado. Luego era una internada de Rubén Peña la que terminaba repeliendo Andrés, siempre bien posicionado, y otra tentativa de Cruz abortada por el veterano guardameta. Se sufría lo indecible atrás y llegaban las amarillas a Baba y Centelles para complicar más aún un panorama ya de por sí bastante oscuro.

Los de Paco López no daban su brazo a torcer y Duk volvió a intentarlo con una plástica chilena que se marchaba fuera por poco. Antes del descanso llegaba la segunda acometida indálica, una incursión de Chirino por banda que el curazoleño optó por finalizar con un disparo a las nubes cuando tenía clara línea de pase para que Thalys remachase en boca de gol. Acababa la primera mitad con la sensación de haber eludido la igualada pepinera y la necesidad de que Rubi moviera piezas como Centelles, muy desacertado y coqueteando con la expulsión, Baba (amonestado) o Aridane, ultralento, para dar entrada a Álex Muñoz, Dzodic y Puigmal en su lugar. El técnico catalán vio claro el movimiento e introdujo al lateral zurdo alicantino y al pivote serbio, pero mantuvo la línea de cinco con el canario atrás.

Al poco de reanudarse el Leganés tuvo el 1-1. Fue tras un buen centro al área de Rubén Peña desde el costado cabeceado por Cisse en el punto de penalti. Pero se topó de nuevo con la figura agigantada de Andrés Fernández, que tiró de reflejos para refrendar un partido antológico bajo palos. Y cuando el Leganés parecía dispuesto a acometer la remontada le llegó el segundo mazazo. La acción la hilvanaron entre Chirino y Arribas por el costado diestro. El curazoleño tocó para el madrileño, que le devolvía el esférico dentro del área para que el ex del Castellón se revolviese con un movimiento digno del mejor '9' y definiera con clase cruzándole la bola a Juan Soriano.

Pegada letal

Tuvo la puntilla nuevamente Embarba en el minuto 65. El capitán rojiblanco se encontró con un balón largo mal defendido por la zaga blanquiazul que supo rentabilizar con un buen disparo ajustado al poste con la zurda que significaba el 0-3, pero el fuero de juego semiautomático avisaba al árbitro de una posición ilegal milimétrica. Verse aún con el 0-2 espoleó de nuevo a los pepineros, que se volcaron en busca de recortar distancias y tuvieron tres aproximaciones de peligro: en la primera De la Fuente chutó alto tras recibir de Cruz y perfilarse bien dentro del área, la segunda fue un disparo de Naim que Andrés despejaba a córner y la tercera un lanzamiento de Cisse desde fuera del área que exigía a Andrés meter la manopla abajo para despejar.

Puigmal sí iba a redondear la cuenta en el último suspiro demostrando la profundidad de banquillo que tiene la UDA. En el 0-3 participaron tres jugadores de refresco. Soko inició la acción con un pase en largo para Baptistao, que controló dentro del área y la dejó atrás sobre la llegada de Puigmal, quien supo remachar con un toque sutil a la red. El triunfo encarama al Almería al segundo puesto de la tabla de forma coyuntural y podría asaltar el liderato en solitario este martes en caso de ganar el duelo suspendido en Ceuta. Es además la quinta portería a cero del curso, segunda consecutiva. A este Almería no se le atisba el techo.