La lesión de Lopy y la maldición del pivote en el Almería
UD ALMERÍA
El senegalés se marchó del campo quejándose del aductor y todo apunta a un problema muscular, si bien el club aún no ha concretado el tiempo de convalecencia
El curso pasado cayeron de gravedad Baba y Gui en una demarcación que va de susto en susto
Los 'cuatro magníficos' del Almería valen un potosí
El doble pivote Baba-Lopy, esa dupla africana en la medular que se atisba fetiche para Rubi, le duró al entrenador catalán 25 minutos. Justo el tiempo que tardó en lesionarse el centrocampista senegalés. Sorprendió el de Vilassar de Mar dando entrada de inicio ante el Sporting de Gijón al ghanés pese a llevar entre algodones desde su reaparición ante el Racing, pero quien duró menos sobre el terreno de juego fue Lopy, quien poco después de rebasar el ecuador del primer acto se tendía en el verde reclamando las asistencias y llevándose la mano a la zona de su adductor derecho.
Ante una previsible lesión muscular el cuerpo médico rojiblanco no quiso arriesgar y se optó por la solución conservadora de retirarlo del terreno de juego para evitar males mayores. El plantel hizo el domingo una suave sesión de recuperación y este lunes ha disfrutado de jornada de descanso sin que el club haya informado del alcance de la dolencia de su futbolista. En en el mejor de los casos, si todo se quedase en un fuerte tirón muscular, ya tendría complicado llegar el sábado a Las Palmas. Es probable que exista microrrotura, lo que podría dejarlo fuera de juego dos o tres semanas. El peor escenario sería que haya desgarro, lo que en función del grado podría elevar el tiempo de convalecencia por encima del mes. Verlo interactuar con el equipo y la afición al término del encuentro para festejar el triunfo hace ser moderamente optimistas.
En cualquier caso llueve sobre mojado en una demarcación que parece maldita en clave indálica. El 24 de noviembre de la temporada pasada Iddrisu Baba caía gravemente lesionado en el duelo ante el Córdoba. El Almería goleó aquel día por 4-0 al conjunto califal, pero salió perdiendo a la larga con la baja del nacido en Acra. El diagnóstico fue rotura parcial del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda, de la que era intervenido el 3 de enero de 2025, diciendo adiós a toda la temporada. Su reaparición no se produjo hasta el pasado 7 de septiembre, tras una ardua recuperación, coincidiendo con la visita al Juegos Mediterráneos del Racing de Santander.
La mala fortuna se cebó con los mediocentros de la UDA la campaña pasada, ya que su sustituto, el portugués Gui Guedes, también sufría una lesión de importancia. En su caso una fractura en el quinto metatarsiano del pie izquierdo con motivo de la visita a La Rosaleda para medirse al Málaga CF el 8 de diciembre, apenas tres jornadas después de caer Baba. El futbolista luso se operaba dos días después y necesitó tres meses para recuperarse, por lo que Rubi tiró durante buena parte del año con la pareja Lopy-Melero, alternándolos con Selvi, llegado en el mercado invernal, y Robertone. Este curso el argentino está inédito y el catalán ha pasado a la reserva, si bien se cuenta también con Stefan Dzodic y André Horta como comodines.
No fue el único futbolista rojiblanco que no pudo acabar el duelo ante el Sporting, ya que Álex Muñoz también solicitó la sustitución en el tiempo de descuento y está por ver su estado, mientras que Chumi sí podría volver a la convocatoria después de que se abortase su regreso el pasado fin de semana al observar que no se encontraba del todo restablecido del esguince de tobillo que lo mantiene en dique seco desde la visita a la Real Sociedad B.
También te puede interesar