La salud del pie en buenas manos

Sin duda alguna, los pies constituyen una parte vital de nuestro organismo debido a su gran complejidad mecánica. Desde el Colegio Profesional de Podólogos de Andalucía abogamos por garantizar a la ciudadanía un correcto servicio de nuestros profesionales sanitarios, que se encuentra totalmente reglado. Para trabajar en esta línea, elaboramos estrategias de seguridad en cuanto a la lucha contra el intrusismo se refiere. Tanto es así, que hoy en día permanecen abiertos 43 procesos judiciales por toda la geografía andaluza iniciados por el servicio jurídico del Colegio andaluz.

En la provincia de Almería, destacamos que en sólo tres meses obtuvimos dos sentencias favorables tras dos querellas planteadas desde el Colegio. El juzgado de primera instancia instrucción nº3 de Huércal Overa, condenó a un hombre a finales de 2015 a 8 meses de prisión y 3.000 euros de indemnización por ejercer la Podología sin tener la titulación exigida. Además, el juzgado de instrucción nº 1 de Berja, condenó en la primavera de 2016 a otro intruso tras la querella interpuesta desde nuestra Institución colegial a pagar cerca de 3.500 euros de multa de indemnización, así como la eliminación de toda publicidad.

Son sentencias favorables que evidencia el riesgo que corren los pacientes cuando ponen sus pies en personas inadecuadas y por las que los podólogos andaluces mostramos satisfacción. Como institución, defendemos ser los únicos profesionales sanitarios especialistas en el pie y con capacidad de recibir, diagnosticar, tratar y prescribir medicamentos, así como de realizar intervenciones quirúrgicas en dicho ámbito. Poner en riesgo la salud de la ciudadanía con esta práctica ilegal puede derivar en graves complicaciones como grandes infecciones o incluso amputaciones, cuando se es tratado por personas que no dominan estas funciones.

Ante una sospecha de intrusismo, desde el Colegio Profesional de Podólogos de Andalucía comprobamos la colegiación del individuo y su inscripción en el registro de centros sanitarios de la consejería de Salud de la Junta de Andalucía. A continuación, buscamos pruebas condenatorias a través de diferentes herramientas. Así se inicia el proceso de denuncia como tal. Además, resulta de importancia el apoyo de la ciudanía como de los órganos públicos oficiales competentes en este marco. Otro aspecto a tratar ha sido la reciente reivindicación de poder formar parte del profesorado en materias de Educación Secundaria relacionadas con nuestros conocimientos sanitarios. Como titulados universitarios, y tal como recoge el Real Decreto 276/2007, los podólogos podemos desempeñar funciones como docentes. Ausentes hasta ahora en la bolsa pública de docentes de Secundaria en Andalucía, reivindicamos el derecho a ser incluidos tal como se recogen otras profesiones sanitarias como Fisioterapia, Farmacia, Odontología, Nutrición humana y dietética, Medicina o Enfermería.

Apostamos por una calidad asistencial de primera, quedando patente que de la Podología española podemos presumir, está a la cabeza de la europea.