Barceló Mirador de AdraLuz, sol, mar y Alpujarra

A escasos metros del mar, al cobijo del faro y del paseo marítimo de Adra, se encuentra el Hotel Barceló Mirador de Adra. Sin duda, una marca que desprende prestigio e internacionalidad. Se podría definir como mar y montaña, por su fantástica ubicación al pie de las alpujarras y frente al mar Mediterráneo. Todo un lujo aromático de sensaciones que invita a dejarse llevar y disfrutar de un alojamiento tan cercano al mar que con sólo abrir la ventana se puede apreciar el aroma y el sonido del mar.

Barceló Mirador de Adra ha tenido una excelente rehabilitación que le permite ensalzar el diseño del interior, espacios funcionales donde la luz y el agua crean una atmósfera que premia el descanso, abrigada por la calidez de sus habitaciones y suites.

Un servicio familiar y atento acompañado de todos los equipamientos y servicios que le convierten en un valor con garantía de bienestar.

Dos piscinas exteriores, piscina cubierta, sala de fitness, sala de aeróbic , sauna, jacuzzi, solárium ajardinado con vistas al mar, parking.

Significar la especialización en el desarrollo de celebraciones, congresos, bodas, reuniones por su alta capacidad de hasta 600 personas y su cuidado trato y profesionalidad. De hecho ocupan el número uno en el ranking en grado de satisfacción de hoteles Barceló de 4 estrellas en España, que sin duda premia un trabajo bien realizado.

Estar en el Mirador de Adra Barceló, es estar en Adra y disfrutar de sensaciones atribuidas al encanto rural. Una zona cálida y soleada, protagonista del Poniente, al pie de las Alpujarras y bañado por el Mediterráneo, un pueblo milenario de gran tradición pesquera y gastronómica que te invita a degustar su popular Ruta de las Tapas. Destacar el pescado, fruto del mar tan admirado y reconocido por estos lares. Déjate seducir por los más bellos atardeceres, disfrutar de sus tranquilas playas o visitar los incomparables entornos naturales e históricos que la rodean.

Su estratégica situación le permitirá conocer desde el Poniente almeriense a las Alpujarras, Málaga, Granada o el Desierto de Tabernas. Una tierra de cine llena de contrastes paisajísticos, que les trasladarán a los anales de la memoria desde las más lejanas culturas hasta nuestros días.

Un hotel trufado de pequeños detalles, que seguro hará las delicias de sus huéspedes, consiguiendo una atmósfera cálida y acogedora para disfrutar del placer de estar en Adra.