Las dos cuidadoras actuales de la conocida colonia de gatos ferales situada junto a las instalaciones del Club del Mar de Almería han lanzado un SOS. Necesitan ayuda económica y la colaboración de voluntarias para poder mantener a los miembros de esta comunidad, cuyo número no para de crecer debido al constante abandono de animales. “Nos tiran sacos con gatos como si fueran piedras”, lamentan sobre esta situación que, aseguran, sufren casi a diario.

“Vienen aquí con transportines o sacos y nos tiran cuatro o cinco gatos. Las noches son muy largas”, abunda una de las cuidadoras sobre un acto clandestino que ya también se ejecuta a la luz del día. “Hasta los domingos a las once de la mañana”, comentan hastiadas, advirtiendo además que son “gatos caseros y no ferales” y, por tanto, con conflictos de adaptación y atenciones muy diferentes. Desconocen el número exacto de felinos que forman parte de esta colonia y temen que los abandonos clandestinos continúen, más con la reciente Ley de Bienestar Animal cuando, en la actualidad, solo hay estas dos personas a cargo de la colonia.

De la misma era responsable una protectora que, “por problemas –explican– la ha dejado y somos nosotras las que estamos intentando sacar a estos gatos adelante y es pienso, esterilizaciones... Necesitamos, además, voluntarias que nos ayuden a limpiar el espacio, retirar ramas...”

La situación de esta colonia se ha complicado también porque es utilizada como refugio de personas sin techo. “Vienen del parque de Las Almadrabillas a dormir, hacen barbacoas y hay mucha rama seca por lo que existe riesgo de incendios y nos encontramos, además, las casetas destrozadas, botellas y otros restos orgánicos que tenemos que limpiar”. Lo han denunciado a la Policía.