La Casa de Correos (III)

Procedente de Puerta de Purchena, las oficinas de Correos abrieron en dos direcciones distintas de la calle Conde Ofalia: un sobrio caserón burgués de dos plantas y el primitivo Colegio de Jesús

La Casa de Correos (III)

16 de julio 2011 - 01:00

EL Diccionario Geográfico-Estadístico-Histórico de España y sus posesiones de Ultramar, de Pascual Madoz (Madrid, 1845-1850), resulta imprescindible para conocer los distintos sectores económicos-administrativos provinciales y, en el caso específico de Almería, de todo lo concerniente a su floreciente minería. En el epígrafe "Correos" referido al periodo de tiempo reseñado, dice:

"Correspondencia.- Para el servicio de la correspondencia hay una administración subalterna de Correos dependiente de la principal de Granada".

Prosigue dando cuenta del trayecto por (mala) carretera de Almería a Madrid y viceversa. Resumiendo, y para que se hagan cargo de la pésima combinación decimonónica, el carruaje postal tirado por caballos partía de la capital los lunes, miércoles y viernes a las cuatro de la mañana; y de allá para acá los martes, jueves y sábados a la una de la madrugada. ¿Saben el tiempo que empleaban en el viaje de ida y vuelta a los madriles?: ¡Nueve días y tres horas!

TRANSPORTES

De Puerta de Purchena al nº 20 de Conde Ofalia. Al no poseer sede propia (siempre de alquiler), tras la glorieta de San Pedro y plaza de San Sebastián se produce el enésimo cambio de domicilio de Correos (Telégrafos disponía de local aparte y servicio permanente en Reyes Católicos, 5) y penúltimo antes del actual y desde décadas definitivo emplazamiento. En concreto a la esquina con Lachambre, frente a c/. Trajano, cuando aún Conde Ofalia se distinguía por su anterior nombre del "Teatro" (por el Principal). Para mayor facilidad de maniobra de los carruajes, Correos disponía de todo el anchurón de la hoy plaza del Marqués de Heredia. Aclaro que este marqués de Heredia y el conde Ofalia son la misma persona: Narciso Heredia y Begines de los Ríos, malagueño vinculado a Almería y Gádor por su matrimonio con Dª Mercedes Heredia y porque desde pequeño residió en la ciudad, donde su padre vino destinado de administrador de Rentas Públicas. Vía materna heredó el condado y de su padre el marquesado, a cuya remodelada plaza algunas/os, con absoluto desconocimiento de la historia local, siguen escribiendo sin razón que lo justifique: "Plaza de los Burros".

Próximos al ficus centenario del Paseo, alternaron tartanas y diligencias movidas por mulas y caballos con, ¡Aleluya!, el Ferrocarril. Un plus de añadida rapidez y comodidad desde que en 1899 inauguraron la línea a Linares-Baeza que nos comunicaba con el llano manchego, la meseta castellana y la capital del Reino. Viajar a la Villa y Corte ya sólo sería cuestión de ¡24! horas en traqueteantes vagones y dos o tres trasbordos; con las estaciones de Moreda y Alcázar de San Juan como jalones intermedios donde reponer fuerzas. ¡Gracias sean dadas a Dios, a don Ivo Bosch y al hierro de Alquife!, ya que sin el mineral del Marquesado granadino aún estaríamos esperando no ya AVES y otras gollerías tecnológicas, sino a las mismísimas locomotoras de vapor y carbonilla en los ojos, por mucho que reivindicase Asafal y el amigo Jesús Martínez Capel. Más adelante (1913) se sumaría el transporte a motor con la compañía barcelonesa de viajeros Alsina Graells, domiciliada frente a Banesto. Por su importancia estratégica, debemos señalar asimismo los vapores regulares a Puertos del norte de África, dando cobertura postal a los miles y miles de emigrados a Orán y Protectorado español. Y a Melilla. En años de paz o durante los enfrentamientos con las kábilas rifeñas, incluidos los sangrientos episodios del Barranco del Lobo, Gurugú y, singularmente, el desastre de Annual en 1921. Campañas en las que destacó el valor del Regimiento de La Corona de guarnición en Almería, y para cuyos oficiales y tropa salían casi a diario valijas con cartas y paquetes con artículos muy valorados en el frente: tabaco y "papel" de liar, jabón o fotografías familiares

PUERTA DEL SOL

"Por fin vamos a tener la Administración de Correos en un sitio amplio, para el mejor movimiento de carruajes.

Se estás ultimando el contrato de arrendamiento del local en que actualmente se halla instalada la imprenta "La Provincia" (inicio del Bulevar), para trasladar allí las mencionadas oficinas, lo que se llevará a cabo en breve. La idea no ha podido ser mejor y por ello felicitamos al Sr. Pineda, que ha sabido buscar lo que hace ya algún tiempo se imponía".

Lo publicaba La Crónica Meridional en febrero de 1894, aunque pese al empeño del administrador Pineda, el traslado no fue tan "en breve" ya que debió esperar un lustro para tener como vecina a la otrora Puerta del Sol de la ciudad murada.

Convertido en referente urbano y ciudadano por su centricidad y variedad de servicios al público (certificados, valores, reembolsos, Lista, etc.), la prensa local generó información casi a diario. En primer lugar publicando cuadros de horarios de los trenes-correo y expreso a Madrid y a las provincias de Granada y Jaén: o bien de los trayectos más cortos en vehículos de tracción animal, guiados por veteranos cosarios ("hombres que conducen personas o cosas de un pueblo a otro"). Desde la Administración central del Paseo del Príncipe partían:

Correo general, a las 11,10

Id. Níjar, 11,10

Id. Poniente, a las 18 horas y

Id. Levante, también a las 6 de la tarde

Además, mantenían acuerdos con tartanas diarias y cosarios semanales de viajeros, correspondencia y paquetería a pueblos próximos, con entrada y salida de las posadas del Príncipe, Catalán, Capricho, San Rafael, La Rosa, de Los Arcos, Pilar, de la Trinidad, del Socorro y Posada del Mar.

Aunque no todo fueron felicitaciones. Cada cierto tiempo podían leerse gacetillas quejándose de la tardanza e irregularidades de la estafeta dirigida (1905) por Miguel Uribe Navarro; Nicolás Torres Rubira, Cartero mayor, más otro nueve oficiales y auxiliares en plantilla

Debió resultar muy rentable sentar plaza de funcionario en el Cuerpo. Tenemos noticias de de dos academias preparatorias: Colegio de Jesús y San Sebastián: "Desde 1º del próximo mes de diciembre se abrirá una academia de preparación para ingreso en el Cuerpo de Correos en el colegio de San Sebastián, dirigida por oficiales de este Ramo en Almería. Para informes, en el expresado colegio: Rostrico, 4".

En Conde Ofalia, 20, gozó de su estancia fija más larga: 16 años. Pero no tuvo que cambiar de calle, sólo de acera y a escasos metros, hasta instalarse definitivamente en el recio y elegante inmueble que había sido Colegio de Jesús. Diario de Almería (febrero, 1917) lo anunció a sus lectores:

"La nueva Casa de Correos.- El gobernador Civil ha remitido al Director General de Correos y Telégrafos después de formalizada la escritura de compra-venta del edificio conocido por el Colegio de Jesús y donde han de instalarse las dependencias del Ramo.

Verificado este trámite, sólo falta la autorización necesaria para dar comienzo las obras que se consideran indispensables… ".

Las obras de adaptación de oficinas y sala de Telégrafos corrieron a cargo de los arquitectos de la Dirección Gral. y de Hacienda, Cabello y Llórens y dos meses después abría sus puertas al público.

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