Una juez de Almería ha impuesto penas que suman dos años de prisión a tres hermanos que reconocieron haber agredido a cuatro agentes de la Guardia Civil durante las fiestas de un pueblo almeriense.

La sentencia, dictada por conformidad y consultada por EFE, señala que los hechos tuvieron lugar sobre las 05:45 horas del 17 de noviembre de 2019 en la feria de Cuevas del Almanzora (Almería).

Según el fallo, cuatro agentes de la Guardia Civil que realizaban servicios de órden público, fueron requeridos para intervenir en una discusión entre dos mujeres.

"Puestos de común acuerdo", y con el "propósito de no someterse a su autoridad", los hermanos acusados comenzaron a agredir a los guardias "sin mediar palabra".

De esta forma, el acusado E.S.S.H. propinó un "fuerte puñetazo" a uno de los agentes, a lo que se unió su hermano K.S.S.H.

Mientras tanto, la acusada K.J.S.S. agarró por detrás por los brazos a este guardia, al que E.S.S.H. golpeó nuevamente a puñetazos en el labio inferior y la nariz.

El acusado K.S.S.H. golpeó con una botella en un brazo a otro de los guardias, y E.S.S.H. dio un "fuerte puñetazo" en la parte superior de la nariz y la frente a un tercer agente, y la acusada forcejeaba y empujaba al cuarto.

El fallo subraya que mientras tenía lugar la agresión, E.S.S.H. portaba en su bolsillo una navaja, y que todos ellos se encontraban bajo los efectos del alcohol, y añade que cuando fue detenido, K.S.S.H. rompió dos linternas de uno de los guardias.

A consecuencia de los golpes, los agentes sufrieron diversas lesiones, de forma que uno de ellos precisó de 25 días para curarse, otro de 61 días, y otro de cuatro.

Por estos hechos, han sido condenados a penas individuales de 12 meses de prisión por un delito de atentado a agentes de la autoridad.

También han sido impuestas penas de doce meses de cárcel por dos delitos de lesiones, y el pago de multas por un delito leve de lesiones.

A K.S.S.H. se le condena también al pago de otra multa por un delito leve de daños, y a indemnizar con 35,53 euros a uno de los guardias.

No obstante, las penas de prisión impuestas a los acusados han sido suspendidas durante el plazo de dos años, a condición de que no vuelvan a delinquir en este periodo.