El patrón de una patera ha sido condenado a cuatro años de prisión por un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros por transportar en julio de 2021 desde Argelia y hasta las costas de Almería a ocho migrantes.

El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), según recoge la sentencia a la que ha tenido acceso EFE este lunes, ha desestimado de esta forma el recurso de apelación contra el fallo condenatorio de la Audiencia de Almería, que ha sido confirmado.

De acuerdo a la sentencia confirmada, los hechos tuvieron lugar el pasado 23 de julio de 2021, cuando sobre las 08:00 horas el Servicio Aéreo de la Guardia Civil localizó una embarcación rígida de fibra, de seis metros de eslora por dos metros de manga, parada en el mar en la playa de "Punta el Cañón" de San Juan de los Terreros, en Pulpí.

Estaba a una distancia de dos metros de la tierra y ocupada por dos personas, el acusado y un menor de edad que lo ayudaba en la navegación, y de ella desembarcaron en la costa ocho inmigrantes, todos ellos naturales de Argelia.

El acusado, una vez se percató del helicóptero de la Guardia Civil, puso rumbo mar adentro y se inició una persecución, en la que hizo caso omiso de las advertencias de las autoridades, hasta que fueron interceptados por los Agentes de la Guardia Civil en tierra, en la zona de la Cala del Castillo en San Juan de los Terreros.

La embarcación se dirigía a las costas españolas e iba patroneada por el acusado y por la persona menor de edad, y había partido de un punto no determinado de la costa argelina a hora indeterminada.

El acusado actuaba en connivencia con otras personas no identificadas y se encargaba de la organización del viaje y el traslado a las costas españolas de los ocho inmigrantes.

De esta forma incumplió "a sabiendas" la legislación vigente sobre la entrada de no nacionales en territorio español, indica la sentencia.

El viaje se inició y desarrolló en buena parte en horas nocturnas, en una embarcación carente de toda medida de seguridad como chalecos salvavidas o iluminación, con un tamaño insuficiente para transportar a las personas que allí iban y la distancia a recorrer.

Por ello, las vidas e integridad física de los viajeros que el acusado desembarcó en España "se pusieron en concreto peligro".

A pesar de lo argumentado por la defensa del condenado, el TSJA ha considerado "sobradamente acreditado" que la embarcación avistada inicialmente por la tripulación del helicóptero de la Guardia Civil transportaba a las personas que después fueron interceptadas y que estas procedieron a desembarcar y a tratar de adentrarse colina arriba cuando la nave estaba a unos dos metros de la tierra.

El alto tribunal cree además que la realidad del transporte de los migrantes, así como del periplo seguido para su traída a la costa española, está igualmente "sobradamente acreditada" y fue admitida por el propio acusado en su declaración prestada en la fase de instrucción, donde admitió que Argelia había sido el punto de partida y que las personas traídas carecían de estancia legal en España.

"Está clara su identificación como la persona que llegó patroneando la embarcación, que trató de volver mar adentro ante la proximidad de la Guardia Civil y que finalmente llevó de nuevo la nave a tierra", ha señalado el TSJA, que hace referencia a las circunstancias que llevan a apreciar la presencia de "peligro cierto para la vida e integridad física de los migrantes transportados".